Barcelona Sporting Club pidió a Zapping, canal con derechos de transmisión y patrocinador del club, que no programe al periodista Santiago Bucaram para sus partidos. La decisión fue informada horas antes del juego contra Liga de Quito, el jueves 24 de julio en el Estadio Monumental de Guayaquil, según el comunicador. El club negó un veto absoluto, pero admitió diferencias por “temas no deportivos” y que solicitó que no se lo ponga como comentarista en ese encuentro.
La exclusión de Santiago Bucaram
Todo se conoció cuando Santiago Bucaram, periodista de Zapping, aseguró públicamente que Barcelona SC le prohibió la entrada al Monumental horas antes del partido. “Ayer se me informó en horas de la tarde, justo antes de salir al Estadio Monumental, que mi acceso iba a ser negado al estadio”, relató en su espacio radial. Bucaram, dijo que ante eso no acudió al escenario deportivo.
El periodista sostuvo que no recibió ninguna explicación formal por parte del club. Aclaró que nunca trató temas personales ni políticos, sino únicamente deportivos. Su testimonio generó reacciones inmediatas en redes sociales, donde se abrió el debate sobre una posible censura.
Desde Zapping y Ecuavisa, empresas relacionadas con la transmisión, intentaron mediar. Sin embargo, Barcelona mantuvo su postura, según narró Bucaram. También afirmó que personal de LigaPro le expresó su desacuerdo con la medida adoptada por el club guayaquileño.
En Barcelona niegan veto, pero reconoce diferencia
Luigi Macchiavello, jefe de comunicación de Barcelona, publicó una aclaración en sus redes personales. “BSC no ha vetado ni prohibido el ingreso al estadio ni a Santiago Bucaram ni a Kevin Verdezoto”, señaló. Sin embargo, confirmó que sí se solicitó a Zapping que no los programe para partidos del club.
Macchiavello argumentó que la decisión se tomó por “temas no deportivos que por respeto no hago públicos y los traté en privado con ellos”. También aclaró que si los periodistas son asignados por otro medio, no hay restricciones para su ingreso al estadio.
El directivo añadió que las críticas deportivas, hechas con altura, serán aceptadas, y que no se pretende impedir el trabajo de la prensa en general. Aun así, la explicación dejó dudas en la opinión pública.
Bucaram quiere una solución
En sus declaraciones, Bucaram insistió en que su trabajo se ha caracterizado por el respeto. “Soy muy contrario y en total desacuerdo con la decisión tomada… jamás me metí en cuestiones personales o políticas”, dijo. También expresó su deseo de resolver el conflicto mediante el diálogo.
“Espero que esto se pueda conversar… que no haya censura”, agregó, en un tono conciliador, pero firme. Aseguró que continuará con su estilo periodístico, que incluye la crítica constructiva y la corrección de errores cuando sea necesario.
Bucaram, sobrino del expresidente de Ecuador Abdalá Bucaram Ortiz, también comentó que su apellido político no debe influir en su labor profesional: “Me he distanciado de cualquier situación política… cada quien es adulto para responder por sus actos”.
Hasta el momento, ni la dirigencia del club ni Zapping han emitido un comunicado oficial adicional. Santiago Bucaram ha recibido muestras de solidaridad de colegas y aficionados en redes sociales.