Jaime Estrada, exalcalde de Manta, desmintió categóricamente las declaraciones de la actual administración municipal. Esta atribuye los atrasos en los pagos de sueldos a obreros, que suman 3 millones de dólares, a un crédito de 100 millones del Banco Mundial gestionado en 2013. Según Estrada, la verdadera causa es la “irresponsabilidad” de la gestión actual.
Pedro Zuloaga, coordinador ejecutivo de la Alcaldía, afirmó el pasado lunes, tras una paralización de obreros, que los atrasos derivan de irregularidades heredadas. Zuloaga señaló que la alcaldesa Marciana Valdivieso ha pagado 12 millones al Banco Mundial por un crédito solicitado cuando el municipio, según él, carecía de capacidad de endeudamiento.
El presupuesto de Manta para 2025 asciende a 120 millones de dólares, con 28 millones provenientes del Gobierno Nacional (2,3 millones mensuales). Además, el municipio destina 7 millones anuales en dos pagos al Banco Mundial y 3 millones mensuales en sueldos, según datos oficiales.
El crédito fue manejado por los exalcaldes Jorge Zambrano y Agustín Intriago
Por su parte, Estrada aclaró que no administró los fondos del crédito, manejados por Jorge Zambrano (65 millones) y Agustín Intriago (35 millones). Este financió obras como el par vial de las avenidas 113 y 4 de Noviembre, regeneración urbana y saneamiento. “Si el crédito fuera el problema, ¿cómo ellos pagaron sin atrasos?”, cuestionó.
Asimismo, Estrada atribuyó la crisis a gastos excesivos de la actual administración, que habría invertido 11,3 millones en eventos, sonido, carpas y mesas, además de incrementar la nómina. “Manta tenía capacidad de pago, pero se requiere responsabilidad”, enfatizó, criticando el “abandono” de la ciudad bajo Valdivieso.
En contraste, la edil Lady García, exconcejal durante la gestión de Zambrano, recordó que, tras el terremoto de 2016, los atrasos en sueldos se resolvieron rápidamente. “Hoy, además del crédito del Banco Mundial, hay deudas con el BDE y por camiones recolectores”, señaló.
Por otro lado, la concejal Diana Flores denunció la falta de austeridad en los presupuestos de 2024 y 2025. Detalló gastos de 3,5 millones en eventos, 2,4 millones en sonido y 1,7 millones en mesas y sillas en 2023; 1,1 millones en eventos en 2024; y 2,6 millones proyectados para 2025.
Flores cuestionó: “¿Cómo los 12 millones pagados al Banco Mundial causan el desbalance, y no los 11,3 millones en eventos?”.
Mientras tanto, el municipio defiende que las inversiones en turismo dinamizan la economía local, beneficiando a pequeños vendedores, hoteles, restaurantes y operadores turísticos. Sin embargo, la falta de transparencia en los gastos sigue generando controversia entre los ciudadanos.
