La Junta de Libertad Condicional de California, Estados Unidos, le negó la libertad condicional a Erik Menéndez, condenado por el asesinato de sus padres registrado en 1989, en Beverly Hills,
La decisión estuvo motivada por su mala conducta en prisión, según informó el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California.
La historia de los hermanos Lyle y Erik Menéndez, quienes se confabularon para matar a sus progenitores, causó conmoción desde su origen, hace 36 años, siendo plasmada en series y películas.
Erik Menéndez seguirá en prisión
La audiencia, realizada de manera virtual en la penitenciaría Richard J. Donovan en San Diego el reciente jueves 21 de agosto, duró 10 horas, superando las expectativas de una sesión que debió duran de dos a tres horas.
A Erik Menéndez, de 54 años, lo interrogaron dos comisionados sobre su comportamiento y actitud respecto al crimen cometido hace 36 años. Él compareció por videoconferencia.
El panel determinó que Menéndez representa un “riesgo irrazonable para la sociedad” debido a infracciones como posesión de teléfonos móviles, peleas con otros reclusos y participación en un esquema de fraude fiscal en prisión.
Un caso que marcó a Estados Unidos
El 20 de agosto de 1989, Erik y Lyle Menéndez, entonces de 18 y 21 años, asesinaron a sus padres, José Menéndez, un influyente ejecutivo musical, y Kitty Menéndez, en su mansión de Beverly Hills.
Los hermanos dispararon múltiples veces con escopetas, intentando inicialmente culpar a la mafia. Sin embargo, la confesión de Erik a su terapeuta llevó a su arresto en 1990.
El juicio, uno de los primeros televisados en Estados Unidos, dividió a la opinión pública. La defensa alegó abusos sexuales y psicológicos por parte de su padre, mientras la fiscalía argumentó que el móvil fue la herencia millonaria.
En 1996, a ambos los condenaron a cadena perpetua sin libertad condicional. Sin embargo, en mayo de 2025, un juez redujo sus sentencias a 50 años a cadena perpetua, permitiéndoles solicitar la libertad condicional. Esta decisión fue impulsada por nuevas pruebas, incluyendo una carta de Erik que detallaba los presuntos abusos y el testimonio de un exmiembro de Menudo, quien afirmó haber sido víctima de José Menéndez.
Erik Menéndez deberá esperar tres años más
Durante la audiencia, el comisionado Robert Barton señaló que, aunque Erik Menéndez ha realizado buenas obras en prisión, su historial disciplinario incluye infracciones graves. “No has sido un preso modelo, y eso nos preocupa”, afirmó Barton, destacando el uso de teléfonos ilícitos y un esquema de fraude como evidencia de que Menéndez aún no respeta las normas.
El fiscal Habib Balian cuestionó si Erik Menéndez estaba genuinamente reformado, sugiriendo que sus disculpas podrían ser estratégicas. Erik expresó remordimiento, afirmando: “Lamento profundamente lo que les he hecho pasar a mi familia desde el 20 de agosto de 1989”. También explicó que participó en el fraude fiscal para protegerse en un entorno carcelario violento.
A pesar de estos argumentos, el panel decidió que no podrá volver a solicitar la libertad condicional hasta dentro de tres años.
La lucha por la libertad continúa
El caso de Lyle Menéndez, de 57 años, será evaluado en una audiencia programada para hoy, 22 de agosto de 2025. Aunque los hermanos cumplen condena en la misma prisión, sus casos se analizan por separado. Además, una petición de hábeas corpus presentada en 2023 sigue pendiente, buscando revisar sus condenas con base en las nuevas pruebas de abuso.
La decisión final sobre cualquier liberación recaerá en el gobernador de California, Gavin Newsom, quien tiene la autoridad para conceder o denegar clemencia.
El caso ha recobrado atención gracias a la serie de Netflix “Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story” y un documental de 2024.
Más de una decena de familiares han pedido la liberación de los hermanos, argumentando que han asumido responsabilidad y merecen una segunda oportunidad. (13).