Este lunes, el gobierno de Venezuela rechazó las acusaciones de narcotráfico formuladas por Estados Unidos contra el presidente Nicolás Maduro. Calificó dichas acusaciones como una “gran farsa”. Además, alertó sobre el despliegue de buques de guerra estadounidenses en el Caribe. Esto ha elevado las tensiones entre ambos países, que acusan mutuamente de desestabilizar la región.
Venezuela niega vínculos con el narcotráfico
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, negó las acusaciones de Estados Unidos sobre el narcotráfico. Tildó de “farsa” las declaraciones que vinculan al presidente Nicolás Maduro con el crimen organizado. Rodríguez aseguró que Venezuela no tiene relevancia en el tráfico de drogas. Citó un informe de la ONU que desmiente las afirmaciones de Washington. La vicepresidenta agregó que, en lugar de combatir el narcotráfico dentro de su propio país, Estados Unidos lanza campañas para “criminalizar” al gobierno venezolano.
Rodríguez también señaló que EE.UU. es “el centro mundial de lavado del narcotráfico”. Sugirió que Washington debería centrarse en resolver su propio problema de drogas antes de desplegar fuerzas militares en la región. Según las autoridades venezolanas, la presencia estadounidense en el Caribe obedece a intereses geopolíticos y no a la lucha contra el narcotráfico.
Venezuela en alerta: Diosdado Cabello pide estar preparados por tensión con Estados Unidos
Despliegue militar estadounidense en el Caribe
El despliegue de ocho barcos militares con misiles y un submarino de propulsión nuclear por parte de Estados Unidos en el Caribe ha sido uno de los principales motivos de tensión entre ambos países. Este operativo, según Washington, tiene como objetivo combatir el tráfico de drogas en la región. Sin embargo, las autoridades venezolanas lo interpretan como una amenaza militar dirigida a su país. Vladimir Padrino López, ministro de Defensa de Venezuela, aseguró que el país está en “alerta máxima” ante el incremento de la actividad militar estadounidense. Considera que esto podría ser un intento de desestabilizar al gobierno de Maduro.
En respuesta, Diosdado Cabello, dirigente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), pidió a la población estar “preparada” ante cualquier eventualidad. Cabello señaló que Venezuela no busca la guerra, pero se mantiene firme en la defensa de su soberanía.
Venezuela critica la intromisión extranjera
El gobierno venezolano también ha acusado a Estados Unidos de intentar asegurar el control de las reservas energéticas de Venezuela. Dicho país posee vastos yacimientos de petróleo y gas natural. Según Rodríguez, Washington estaría utilizando la excusa del narcotráfico para consolidar su influencia en la región. También busca asegurar las rutas energéticas clave para su economía. En este contexto, las tensiones no solo son políticas, sino también económicas. Las reservas de hidrocarburos de Venezuela son uno de los recursos más codiciados del mundo.
El gobierno de Caracas ha solicitado a la comunidad internacional que se pronuncie sobre el creciente despliegue militar de EE.UU. en la región. Asimismo, les pide hablar sobre lo que considera una violación de su soberanía.