Este domingo 7 de septiembre de 2025, miles de simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro ocuparon las calles de las principales ciudades de Brasil.
Las protestas se realizaron durante el Día de la Independencia, exigiendo una amnistía para Bolsonaro, procesado por intento de golpe tras la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en 2022. Los actos reflejan la polarización política del país, según reportes locales. La movilización busca presionar al Congreso brasileño para aprobar dicha amnistía.
Superaron el número de simpatizantes
Estudios del Monitor del Debate Político y el Centro Brasileño de Análisis e Planificación (Cebrap) indican que las convocatorias de la derecha bolsonarista superan en asistencia a las de la izquierda liderada por Lula.
En Río de Janeiro, unas 30.000 personas se reunieron en la playa de Copacabana en apoyo a Bolsonaro, frente a entre 3.000 y 4.000 en el centro a favor de la izquierda. En Sao Paulo, la concentración bolsonarista destacó por la presencia de Tarcisio de Freitas. Las cifras muestran una mayor movilización de la extrema derecha.
Las protestas de la extrema derecha se centraron en críticas al presidente del Tribunal Supremo, Alexandre de Moraes, y en la demanda de una amnistía general. De Freitas, gobernador de Sao Paulo, defendió desde la avenida Paulista que el Supremo juzga a Bolsonaro por un “crimen que no existió”.
Él también llamó a rechazar la “dictadura” de un poder sobre otro, apuntando a De Moraes como “tirano”. Las manifestaciones reflejan tensiones entre sectores políticos.
Un desfile patriótico en Brasilia
Por su parte, el presidente Lula participó en el desfile militar de la Explanada de los Tres Poderes en Brasilia. Acompañado de ministros y autoridades, Lula pronunció mensajes de patriotismo durante la ceremonia oficial del Día de la Independencia. La Presidencia informó que asistieron 45.000 personas, superando las 30.000 del año pasado, según datos oficiales. Los jueces del Tribunal Supremo Federal no estuvieron presentes en el evento.
En contraste con las protestas de la derecha, las manifestaciones de la izquierda defendieron la soberanía nacional y rechazaron a Bolsonaro. En Río de Janeiro, los actos de izquierda se enfocaron en fortalecer la unidad del gobierno de Lula. La ceremonia en Brasilia incluyó desfiles militares y discursos que resaltaron los valores nacionales, según la Presidencia. La participación masiva marcó la jornada oficial.
Tarcisio de Freitas emerge como líder bolsonarista
Tarcisio de Freitas, posible candidato de la extrema derecha en futuras elecciones, lideró la concentración en Sao Paulo. Bolsonaro, inhabilitado para postularse, no asistió, dejando a De Freitas como figura central de las protestas. Desde la avenida Paulista, exigió una amnistía general y criticó al Tribunal Supremo por el caso de Bolsonaro. Su discurso buscó movilizar a los simpatizantes de la derecha.
Las protestas en Copacabana y Sao Paulo mostraron pancartas y cánticos a favor de Bolsonaro y contra Lula. De Freitas insistió en que no aceptarán dictados del Tribunal Supremo, especialmente de De Moraes. Mientras, las concentraciones de la izquierda en el centro de Río abogaron por la estabilidad del gobierno de Lula. La jornada reflejó las divisiones políticas del país.
El desfile militar en Brasilia destacó por su escala, con 45.000 asistentes según la Presidencia. Los mensajes de patriotismo de Lula contrastaron con las demandas de amnistía de la derecha. La ausencia de jueces del Tribunal Supremo en el evento oficial marcó la distancia con el proceso contra Bolsonaro. Las protestas y el desfile definieron el día en Brasil.