El ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, y el jefe del Comando Operacional del Comando Conjunto de Fuerzas Armadas (FF. AA.), Enrique Aristizábal, comparecieron el miércoles 18 de junio de 2025 ante la Comisión de Fiscalización y Control Político en Ecuador. Expresaron su preocupación por la presunta liberación de más de seis mil sospechosos de actos delictivos capturados por las FF. AA., señalando una desarticulación de la justicia con la lucha contra la delincuencia organizada.
Desafíos en la lucha antidelincuencial
Gian Carlo Loffredo, ministro de Defensa, aseguró que durante el 2025, las Fuerzas Armadas capturaron a más de seis mil sospechosos de actos delictivos. Sin embargo, lamentó que muchos de ellos fueran liberados rápidamente. Estas acciones de jueces y fiscales resultan, según Loffredo, incomprensibles. Tal situación evidencia una desarticulación entre las entidades de justicia y los esfuerzos militares.
Añadió que, además de posibles errores procesales, la actuación judicial muestra una grave crisis. Los fallos, expresó, responden a intereses de grupos delictivos. No responden al anhelo de seguridad de los ecuatorianos.
Demandas al sistema de justicia
El ministro Loffredo enfatizó la necesidad de un sistema de justicia sólido. Debe ser probo, íntegro y comprometido con el bienestar nacional. Loffredo aseveró: “El país necesita un sistema de justicia… que acompañe a la lucha diaria de todas las instituciones”. Un sistema de justicia eficaz protegería a ciudadanos, militares y policías. Además, no sería funcional a las mafias, dijo el Ministro de Estado.
Resultados y compromiso militar
El jefe del Comando Operacional, Enrique Aristizábal, detalló los resultados operativos del eje de seguridad. Ratificó que muchas de las más de seis mil personas aprehendidas salieron libres. Esto ocurrió a los dos, tres o cuatro días, indicó. Esta situación demuestra una falta de correspondencia de otras instituciones públicas. La lucha contra la delincuencia, dijo Aristizábal, es de todos los ecuatorianos.
El Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas reiteran su compromiso con la seguridad nacional. Sin embargo, insisten en que sus esfuerzos requieren coordinación real. Una articulación sostenida con el sistema de justicia es crucial.