Desde temprano, ciudadanos de Santa Ana formaron filas frente al área de catequesis de la iglesia local para el Festival de la Cosecha 2025.
La apertura de puertas, programada a las 10h00, generó un ingreso acelerado de compradores. Los santanenses buscaban productos agrícolas donados por comunidades locales.
Hugo Mieles, miembro del Movimiento Juan 23, lideró la venta de los productos a precios módicos. Según Mieles, la alta afluencia de compradores ocurre cada año.
Los productos, frescos y variados, atrajeron a cientos de personas. El evento, parte de las fiestas patronales de Santa Ana, destacó por su organización y el apoyo comunitario.
Los asistentes aprovecharon los precios accesibles para abastecerse.
Donaciones de comunidades locales
Las comunidades de Taina, Visquije, Peminche, Bonce, Monte Oscuro, Camino Nuevo, y Zapote, entre otras, donaron productos agrícolas para la venta.
Los agricultores entregaron los productos el sábado 12 de julio. La iglesia almacenó las donaciones en el área de catequesis para su comercialización.
Entre los productos donados destacaron plátano, maíz, yuca, guineo, naranja, papaya, limón, toronja, zapallo y huevos criollos. La variedad permitió a los compradores acceder a alimentos frescos.
Sin embargo, Mieles señaló que las donaciones fueron menores este año. El plátano, conocido localmente como verde, registró una menor cantidad en comparación con años anteriores. Pese a esto, los productos disponibles mantuvieron alta demanda.
Precios accesibles en el Festival de la Cosecha
Un racimo de plátano se vendió a $3,50, un precio competitivo ante la escasez que elevó su valor en el mercado, según Hugo Mieles. Los compradores valoraron los costos bajos ofrecidos en la Fiesta de la Cosecha.
El plátano fue el primer producto en agotarse. Mieles explicó que en años anteriores el plátano dominaba las donaciones, pero en 2025 la cantidad disminuyó.
Otros productos, como maíz y yuca, también atrajeron a los asistentes. La venta benefició a familias de Santa Ana con acceso a alimentos frescos. La organización del Movimiento Juan 23 garantizó que los productos se vendieran de forma ordenada. Los fondos recaudados apoyan iniciativas de la iglesia local.
Con información de Miguel Cedeño