La escudería Red Bull Racing confirmó este lunes 22 de septiembre de 2025 que Christian Horner, de 51 años, ha rescindido su contrato como director general y jefe de equipo, vigente hasta 2030. El francés Laurent Mekies asume el cargo para estabilizar el equipo ante desafíos internos y competitivos en la Fórmula 1.
En un comunicado oficial, Red Bull anunció que Horner “abandona la escudería” tras negociaciones que culminaron en un acuerdo de salida. El británico, quien asumió el rol en 2005 a los 31 años, dirigió al equipo durante 20 años, convirtiéndolo en una potencia con seis títulos de constructores y ocho de pilotos. La compensación por la rescisión se estima en $101,2 millones, según fuentes cercanas al equipo.
Destaca logros conseguidos
Horner expresó su orgullo por los logros alcanzados, incluyendo los cuatro títulos consecutivos de Max Verstappen desde 2021 y los de Sebastian Vettel entre 2010 y 2013. “Ha sido un honor liderar este equipo épico”, señaló, agradeciendo a accionistas como el fallecido Dietrich Mateschitz y la familia Yoovidhya. Con esta salida, Horner queda libre para explorar opciones en la Fórmula 1 a partir del verano de 2026.
Oliver Mintzlaff, CEO de proyectos e inversiones de Red Bull, destacó el “compromiso incansable” de Horner en establecer al equipo como exitoso. La transición busca enfocar recursos hacia el desarrollo del motor propio con Ford para 2026, en un contexto de regulaciones renovadas en chasis y unidades de potencia.
Tensiones internas que precipitaron la salida
La decisión se gestó tras meses de dificultades en la temporada 2025, donde Red Bull perdió terreno ante McLaren en el campeonato de constructores, con Oscar Piastri liderando la tabla de pilotos por 69 puntos sobre Verstappen. El equipo priorizó la lucha por el título de pilotos, logrando dos victorias, pero el rendimiento general decayó.
A las fricciones con Verstappen y su entorno se sumó la salida del ingeniero Adrian Newey, considerado el mejor diseñador de la historia de la F1, hacia Aston Martin en abril de 2024. Newey citó insatisfacciones con el equipo y la percepción de que su rol era subestimado. Estas pérdidas de personal clave erosionaron la estructura interna de Red Bull.
En 2024, Horner enfrentó acusaciones de acoso por una empleada, de las cuales fue absuelto tras una investigación interna. Sin embargo, el incidente generó un quiebre con la cúpula, incluyendo al accionista Chalerm Yoovidhya y Mintzlaff, quien impulsó la remoción tras el Gran Premio de Gran Bretaña en julio.
Impacto en el equipo y sucesión
Mekies, proveniente de Racing Bulls (equipo hermano de Red Bull), asume con experiencia en Ferrari y la FIA. Su relación con la gerencia senior facilitará la transición. Alan Permane, de 58 años, fue promovido a jefe de equipo en Racing Bulls desde su rol como director de carreras.
Red Bull, con sede en Milton Keynes, Reino Unido, mantiene a Verstappen y Yuki Tsunoda como pilotos principales. El equipo expresó confianza en continuar “empujando al máximo” para el resto de la temporada. Horner, en su despedida, anticipó el debut del motor Red Bull-Ford en el RB22 y el auto de calle RB17.
Esta salida cierra un ciclo transformador en la Fórmula 1, donde Horner pasó de liderar un equipo en puntos. Además de dominar eras con Vettel y Verstappen. La colaboración con Ford para 2026 representa un nuevo capítulo para Red Bull en un deporte en evolución.