La reconstrucción de la calle Tomás Larrea, conocida como Calle 8, en la parroquia Picoazá, Portoviejo, registra un avance del 65-70%, según informó el ingeniero residente Fernando García. Las obras, iniciadas en noviembre de 2024, se retomaron hace un mes tras dos meses de paralización, con el objetivo de mejorar la conectividad y beneficiar a cientos de familias.
Retorno de los trabajos tras paralización
Los trabajos en la calle Tomás Larrea, que abarca 330 metros de vía, se detuvieron por dos meses y medio debido a retrasos en los pagos del Municipio de Portoviejo, según fuentes oficiales. Actualmente, diez trabajadores y maquinaria están activos en la obra, enfocados en la construcción de bordillos y la preparación de la base con suelo y cemento. Fernando García, ingeniero residente, destacó que los trabajos de alcantarillado sanitario, pluvial y el sistema de riego para áreas verdes ya culminaron.
Avances en infraestructura de la calle de Picoazá
En las últimas semanas, se ha avanzado en la fundición de veredas, un paso previo a la nivelación de la calzada y el asfaltado. La obra, con una inversión de más de 300.000 dólares, incluye aceras, bordillos, una carpeta asfáltica de alta calidad, un sistema eléctrico con luces LED, riego, jardinería y señalización vial. Sin embargo, García señaló que la escasez de asfalto en el país podría retrasar la entrega, sin precisar una fecha de culminación.
Reacciones de los moradores de Picoazá
Los habitantes de Picoazá expresan expectativas y preocupaciones. Xavier Laz, morador del sector, indicó que los retrasos afectan al comercio local y complican la movilidad de los vehículos. Eduardo Palma, otro residente, reportó accidentes causados por los trabajos inconclusos, incluyendo caídas debido a escombros. Una vecina, que prefirió no identificarse, mostró escepticismo sobre los plazos, afirmando que “los trabajos siguen igual” pese al reciente avance.
Contexto de la obra
La reconstrucción de la Calle 8, anunciada por el alcalde Javier Pincay en noviembre de 2024, busca modernizar la infraestructura de Picoazá, una parroquia clave de Portoviejo. La obra promete mejorar la conectividad y la calidad de vida de cientos de familias, pero la paralización generó malestar entre los vecinos, quienes esperan que los trabajos concluyan sin más demoras.
El Municipio de Portoviejo ha estabilizado los pagos, según García, lo que permite avanzar sin interrupciones. Mientras, los habitantes exigen la pronta culminación de la obra, inicialmente programada para marzo de 2025.
Los trabajos en la calle Tomás Larrea se iniciaron en noviembre de 2025 con un plazo inicial de 90 días, plazo que no se cumplió.