Un incendio que se registró la mañana de este lunes 23 de junio de 2025, en el reasentamiento El Guabito de Portoviejo, dejó varios daños materiales.
El fuego alertó a los vecinos y movilizó a los rescatistas del cuerpo de bomberos del cantón, quienes lograron controlar las llamas. Afortunadamente, el hecho no dejó personas heridas o afectadas por el humo.
El incendio se originó en una bodega
El siniestro ocurrió en un área habilitada como bodega para materiales de reciclaje, ubicada al final de una calle peatonal, aunque cerca de varias viviendas del reasentamiento.
Según los primeros reportes, el fuego se habría originado por un cortocircuito que generó una chispa, la cual alcanzó materiales altamente combustibles almacenados en el lugar, como plásticos y telas.
Pánico por las llamas
La rápida propagación de las llamas generó pánico entre los residentes, quienes, ante la emergencia, actuaron de inmediato utilizando baldes con agua para contener el avance del fuego hasta la llegada de los bomberos. Su temor era que las llamas se propagaran y alcanzaran a las viviendas de la zona.
El cuerpo de bomberos de Portoviejo recibió el reporte y desplegó varias unidades al sitio. Gracias a la intervención inicial de los vecinos y la acción coordinada de los rescatistas, el incendio fue controlado en poco tiempo.
“Cuando vimos el humo, todos salimos corriendo con baldes y mangueras. Fue un momento de mucha tensión porque las casas están muy cerca, pero gracias a Dios y al esfuerzo de todos, no pasó a mayores”, relató una vecina del sector.
Medidas de prevención tras el incendio
Los bomberos, tras sofocar el fuego, permanecieron en el lugar durante una hora para realizar una inspección exhaustiva y asegurarse de que no existieran puntos calientes que pudieran reavivar el incendio.
Los puntos calientes son zonas donde el fuego sigue activo a baja intensidad, a menudo bajo tierra, en raíces, turba o escombros, tras un incendio. Estas áreas, que pueden alcanzar temperaturas de 500 °C, no siempre son visibles, pero liberan calor detectable.
Su persistencia se debe a la combustión lenta de materiales como madera seca o carbón, alimentada por oxígeno subterráneo.
Ciertos materiales facilitan el origen de incendios
Los incendios en bodegas suelen originarse por fallos eléctricos (30% de los casos), almacenamiento de materiales inflamables como cartón o plástico, y actividades como soldadura. Las bodegas con estanterías altas (10-20 metros) y pasillos estrechos dificultan la extinción manual, aumentando el peligro.
Es clave evitar acumular líquidos combustibles cerca de fuentes de calor y garantizar que cables eléctricos estén en buen estado. (13).
