El Presidente Daniel Noboa firmó el Decreto Ejecutivo 599, documento en el que establece un estado de excepción en varias provincias ecuatorianas. La medida responde al incremento de la inseguridad. Guayas, Manabí y Los Ríos están incluidas. La duración será de 60 días.
Por tanto, el estado de excepción busca controlar la violencia. Grupos armados han intensificado sus actividades delictivas. El Gobierno prioriza la seguridad ciudadana. Sin embargo, las restricciones generan debate público. La población espera resultados concretos.
Además, el decreto abarca los centros penitenciarios nacionales. La crisis carcelaria agrava la situación de inseguridad. Las Fuerzas Armadas reforzarán operativos en cárceles. Por ello, la medida incluye suspensiones de derechos. La proporcionalidad será clave.
Toque de queda en todos los cantones de Los Ríos
En consecuencia, Los Ríos enfrenta restricciones dentro del reciente estado de excepción. Todos sus trece cantones tendrán toque de queda nocturno. La movilidad estará limitada de 22h00 a 05h00. Esta disposición busca reducir los delitos violentos. La provincia requiere atención urgente.
Asimismo, los cantones afectados son Babahoyo y Quevedo. También incluyen Buena Fe, Vinces y Ventanas. Otros son Pueblo Viejo, Valencia y Mocache. Además, Urdaneta, Baba, Palenque, Quinsaloma y Montalvo. Los ciudadanos deberán ajustar sus rutinas. Por otro lado, el toque de queda genera preocupación económica. Los negocios nocturnos anticipan pérdidas significativas. Los habitantes piden claridad sobre excepciones. No obstante, el Gobierno defiende la medida. La seguridad prevalece como prioridad.
Estado de excepción se decretó por conmoción interna
El estado de excepción, según el Gobierno de Ecuador se da por grave conmoción interna como consecuencia de la violencia criminal. Dentro de la argumentación para justificar la medida, el decreto incluye varios de los últimos casos de crímenes reportados en las provincias en las que estará vigente el estado de excepción. La violencia ha crecido en varias provincias ecuatorianas, sin embargo, en las localidades en las que se impuso toque de queda, los crímenes representan el 66 por ciento de la cifra nacional. En consecuencia, 22 cantones tendrán restricciones por 60 días.
En paralelo, las elecciones presidenciales del 13 de abril complican el panorama, el proceso se llevará en medio del presente estado de excepción. La ciudadanía exige soluciones efectivas contra la inseguridad. Los candidatos debaten estrategias de control. Por ello, la medida de Noboa está bajo escrutinio, sobre todo en el contexto de la confianza pública.