El Ministerio de Ambiente y Energía anunció el pasado 4 de octubre la revocatoria de la licencia ambiental otorgada a la empresa Dundee Precious Metals, responsable del proyecto Loma Larga. La decisión se basó en los informes técnicos emitidos por la Municipalidad de Cuenca y la Prefectura del Azuay. Estos informes fueron entregados el 23 de septiembre. Dos días después, el Gobierno inició oficialmente el proceso para suspender el permiso ambiental.
Esta medida fue recibida con satisfacción por las autoridades locales. Ellas lideran la oposición a la minería metálica en los páramos de Quimsacocha, considerados una fuente vital de agua para miles de cuencanos desde hace años.
Una lucha histórica en defensa del agua
Durante un evento público realizado este sábado, el alcalde de Cuenca Cristian Zamora agradeció al presidente por escuchar los pedidos de la ciudad. Reconoció los argumentos técnicos de las instituciones. “A todas las entidades que presentamos informes, especialmente a Etapa, que ha sostenido esta lucha histórica en defensa del agua y del Cajas, mi gratitud. Pero sobre todo, gracias a la inmensa multitud que se pronunció el 16 de septiembre”, señaló.
Ese día, una marcha multitudinaria recorrió las calles de Cuenca, en defensa del agua y los páramos. Movilizó a organizaciones sociales, colectivos ambientales y ciudadanos en general. Para las autoridades, esa manifestación fue clave en la presión social que derivó en la revocatoria.
Prefectura: “El Azuay se mantiene firme en la defensa de la vida”
Mediante un comunicado, la Prefectura del Azuay destacó que esta resolución representa “el resultado de la lucha incansable del pueblo azuayo en defensa del agua, los páramos y la vida”. El documento recordó que el pasado 16 de septiembre, durante el llamado “quinto río”, miles de personas marcharon pacíficamente en rechazo al proyecto minero.
El prefecto Juan Cristóbal Lloret insistió en que esta victoria no marca el fin del proceso. “Seguimos en pie de lucha hasta que se revierta la concesión minera. El Azuay ha hablado con fuerza: queremos un futuro libre de contaminación y minería en zonas de recarga hídrica”, manifestó.
Exigen la revocatoria total del proyecto
Tanto Zamora como Lloret coincidieron en que la suspensión de la licencia es solo un paso intermedio. “Es una buena noticia que se haya revocado la licencia, pero falta un paso más. Señora ministra de Energía, no queremos que mañana vuelvan a otorgar otra autorización. Estamos vigilantes y pedimos la revocatoria definitiva de la concesión”, enfatizó el alcalde.
Zamora añadió que una vez que se elimine la concesión, “ya no habrá nada ni nadie que atente contra el santuario natural de El Cajas”. Este lugar es considerado uno de los ecosistemas más valiosos del país.
Contexto reciente
La resolución del Ministerio se suma a una serie de acciones de defensa ambiental en el Azuay. Los proyectos mineros en zonas sensibles han generado amplio rechazo social. En los últimos años, las comunidades han impulsado consultas populares y procesos legales para frenar las concesiones.
La decisión también llega en un momento en que la opinión pública nacional sigue con atención los conflictos socioambientales en varias provincias del país. Mientras tanto, los movimientos ciudadanos en Cuenca y Azuay preparan nuevas jornadas de movilización. Estas exigen que la revocatoria de la licencia se convierta en la anulación total de Loma Larga.