Ecuador registra una reducción del 13,4% en el consumo de diésel dos semanas después de la eliminación del subsidio. El dato corresponde a la medida nacional.
El Gobierno Nacional resaltó que la medida busca frenar el uso del combustible en actividades ilícitas como la minería ilegal, el contrabando y el narcotráfico.
Subsidio al diésel beneficiaba economías ilegales
El Ministerio de Ambiente y Energía indicó que el Estado “le puso un alto definitivo a las economías criminales que durante décadas se beneficiaron del subsidio al diésel”.
De acuerdo con las autoridades, el subsidio al diésel representaba pérdidas millonarias y afectaba la correcta distribución de los recursos públicos destinados a la economía nacional.
Provincias fronterizas evidencian mayor reducción
El Gobierno destacó que la reducción se nota especialmente en provincias con fuerte presencia de contrabando. En Carchi, fronteriza con Colombia, el consumo bajó un 25,7%.
La diferencia de precios motivaba el contrabando. En Ecuador el diésel costaba 1,80 dólares mientras en Colombia se vendía en alrededor de tres dólares, lo que generaba negocio ilícito.
Impacto en minería ilegal y consumo regional
El Ministerio agregó que el contrabando resultaba un negocio rentable para las mafias que se beneficiaban del subsidio al diésel a costa de los recursos nacionales.
En Imbabura, epicentro de las protestas indígenas contra la medida, el consumo cayó un 25,1%. En El Oro, frontera con Perú, disminuyó un 22,6%.
Subsidio redirigido a sectores vulnerables
El comunicado del Gobierno explicó que en la minería ilegal, el diésel resulta clave para mover maquinaria, bombas de agua y generadores eléctricos en los campamentos.
Finalmente, el Ministerio recordó que los recursos eliminados del subsidio al diésel ahora se destinan a transportistas, agricultores y a personas en condición de vulnerabilidad.