Un helicóptero de la Policía Nacional de Colombia fue derribado este jueves 21 de agosto en una zona rural de Amalfi, Antioquia, tras ser atacado, presuntamente con un dron. El hecho deja al menos un técnico muerto y dos uniformados heridos. El incidente ocurrió mientras la aeronave brindaba seguridad a operaciones de erradicación manual de cultivos de coca en la vereda Los Toros. Según el presidente Gustavo Petro, el ataque sería una represalia del Clan del Golfo tras la incautación de 1,5 toneladas de cocaína en la región de Urabá.
El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, confirmó que el helicóptero realizaba labores de apoyo a uniformados en la zona, donde operan grupos armados como las disidencias de las FARC y el Clan del Golfo. Las autoridades activaron la red hospitalaria para atender a los heridos, aunque el número exacto de víctimas aún no está confirmado debido a la dificultad de acceso al área.
Ataque contra helicóptero
El ataque se registró en un contexto de alta tensión en Amalfi, una región afectada por la presencia de grupos armados ilegales que buscan controlar el narcotráfico y otras actividades ilícitas. El impacto de la aeronave obligó a un aterrizaje de emergencia. “Fue atacado, no sabemos con qué, pero sí aterrizó de emergencia”, indicó una fuente anónima de la Policía a medios locales, destacando las limitaciones para obtener detalles precisos debido al terreno.

Rendón, a través de su cuenta en X, expresó: “Queridos paisanos, esta es la paz total de Petro. En zona rural de Amalfi derribaron un helicóptero de la @PoliciaColombia que al parecer estaba brindando seguridad a uniformados en labores de erradicación manual a cultivos de coca. Los policías fueron atacados por un dron”.
Antecedentes de violencia en la región
Antioquia, especialmente su nordeste, ha sido escenario de enfrentamientos entre grupos armados como el Clan del Golfo y las disidencias de las FARC. Ambas agrupaciones se disputan el control de rutas de narcotráfico y cultivos ilícitos. En mayo de 2024, Infobae reportó combates en Remedios, Antioquia, que dejaron al menos 18 muertos, evidenciando la intensidad del conflicto en la zona. Además, en octubre de 2024, otro helicóptero Black Hawk de la Policía fue atacado en Anorí, aunque en esa ocasión no se reportaron víctimas fatales.
El presidente Petro, también en X, vinculó el ataque al reciente decomiso de cocaína en Urabá. “Logramos incautación de tonelada y media de cocaína del Clan del Golfo en Urabá y su reacción sucede en la zona, en la erradicación de hoja de coca en Amalfi, Antioquia, logran derrumbar un helicóptero de la policía, con hasta el momento un técnico muerto”. Este hecho resalta la conexión entre las operaciones antidrogas y las retaliaciones de los grupos criminales.
Desafíos para la seguridad colombiana
La erradicación de cultivos ilícitos sigue siendo un desafío para las autoridades colombianas. Colombia registró 253,000 hectáreas de coca en 2023, según la ONU. La presencia de drones como arma en estos ataques evidencia la evolución de las tácticas de los grupos armados, complicando las operaciones de seguridad. En febrero de 2025, un ataque con drones en El Plateado, Cauca, dejó una civil herida.