Un violento ataque armado perpetrado la noche de este jueves 17 de julio cerca de una cancha deportiva en la parroquia Leonidas Proaño, cantón Montecristi, provincia de Manabí, dejó un saldo de cinco personas fallecidas y dos heridas. Entre las víctimas mortales se encuentra un menor de edad. Según Giovanni Naranjo, comandante de la Zona 4, el incidente estaría vinculado a una retaliación entre grupos de delincuencia organizada a raíz del asesinato de uno de los dirigentes del grupo delictivo Los Lobos. Además, según las primeras investigaciones también tendría vínculos con el ataque armado registrado en un centro de tolerancia la noche de este miércoles 16 de julio. Los atacantes, que se desplazaban en una camioneta, utilizaron armas de grueso calibre.
El suceso ocurrió alrededor de las 19:00, cuando sujetos armados irrumpieron en el lugar y dispararon contra las personas presentes. Cuatro víctimas murieron en el lugar, mientras que una quinta falleció en un centro de salud en Manta. Los dos heridos, fueron trasladados a casas de salud. Naranjo, confirmó que se recolectaron casquillos de armas largas de diversos calibres, aunque el análisis de indicios balísticos aún está en curso.
Contexto de violencia en Manabí
La masacre se enmarca en una escalada de violencia en Manabí, donde bandas como Los Lobos y Los Choneros disputan el control territorial. Las autoridades vinculan este ataque con un hecho registrado la noche anterior en un nightclub de Jaramijó. Los indicios balísticos en ambos eventos muestran similitudes, sugiriendo una conexión entre los casos. En 2025, el distrito Manta, reporta 264 muertes violentas, consolidándose como el más afectado de la provincia.
La Policía Nacional ha intensificado sus esfuerzos para contener la violencia. Refuerzos policiales y unidades tácticas de Guayaquil y Quito llegarán este viernes para fortalecer la seguridad en la zona. Además, las Fuerzas Armadas colaboran en operativos para restablecer el orden en áreas críticas de la provincia.
Investigaciones y respuesta policial
Las unidades de inteligencia e investigación de la Policía están activadas para esclarecer los detalles del ataque. Según el coronel Naranjo, los vehículos utilizados en el atentado de Montecristi también estarían relacionados con el hecho en Jaramijó, lo que refuerza la hipótesis de una retaliación entre grupos delictivos. Aunque no se descarta que el menor fallecido haya sido una víctima colateral, las autoridades indican que los atacantes tenían objetivos específicos. La Policía y las Fuerzas Armadas han implementado una estrategia conjunta que incluye mayor presencia en áreas de alta incidencia delictiva.
Esfuerzos por la seguridad
Las autoridades han asegurado que los refuerzos policiales y la llegada de grupos tácticos buscan devolver la tranquilidad a la ciudadanía. Este hecho se suma a una serie de episodios violentos en Manabí, impulsados por el narcotráfico y la delincuencia organizada, que han convertido a la provincia en un foco de inseguridad en 2025. (MK)