Portoviejo prepara la segunda fase de su programa de esterilización de fauna urbana, buscando atender a 600 perros y gatos, tras el éxito de la primera etapa que benefició a 360, informó Jonathan Guzmán, jefe técnico de Fauna Urbana. El trabajo de esterilización se adjudicó a una veterinaria local por 7.200 dólares, se informó.
El funcionario recordó que en la primera jornada, iniciada el 18 de marzo de 2025, se atendió a 360 animales (240 perros y 120 gatos) que llegaron con sus dueños desde diversos sectores, como la ciudadela Los Tamarindos, la parroquia Picoazá y zonas rurales, así como de refugios de animalistas. “Fue un éxito, abarcamos a personas de escasos recursos y animales en situación de calle”, afirmó Guzmán.
La primera fase priorizó a animales de calle y refugios, pero también incluyó a ciudadanos de bajos ingresos de zonas urbanas y rurales. Guzmán señaló que muchas personas acudieron a la jefatura para solicitar ayuda, y tras verificar su situación económica, se les otorgó un cupo. El costo de una esterilización privada puede alcanzar los $50 para gatos y más para perros, debido a la mayor cantidad de material requerido, lo que hace estas campañas esenciales para sectores vulnerables.
Nueva campaña para perros y gatos con mayor alcance
Para la segunda fase, el Municipio de Portoviejo estima atender a 600 animales, duplicando el alcance de la primera etapa. Guzmán explicó que están elaborando un convenio específico con la Facultad de Veterinaria de la Universidad Técnica de Manabí (UTM). “Nosotros dotaremos de insumos, y la UTM facilitará las instalaciones y el equipo médico para las cirugías”, detalló. Aún no hay una fecha definida, pero esta etapa dará mayor cabida a rescatistas y animales en situación de calle, que serán capturados, operados y devueltos a su hábitat tras el postoperatorio.
El abandono animal sigue siendo un problema crítico en Portoviejo, pese a la ordenanza de convivencia responsable aprobada hace casi cuatro años. Desde el Centro de Fauna Urbana se espera que la llegada de una clínica móvil, cuyo proceso se retrasó en 2024, facilite futuras intervenciones. Mientras tanto, el programa busca reducir la proliferación de fauna urbana y promover la tenencia responsable.
La ordenanza, reglamentada en 2022, tipifica el abandono como infracción muy grave, con multas de $940 a $2.350 y 72 horas de servicio comunitario. Sin embargo, su aplicación es limitada, según Marco Holguín, integrante de la Fundación Ángeles Silenciosos. Reporta 100 denuncias en tres años, con el abandono como el caso más recurrente.