Recibió cinco disparos y murió tras una larga agonía. Se trata de Giuseppe Carreño Gómez, quien sufrió un atentado el pasado 30 de enero, pero ayer falleció.
El hombre estuvo como diecinueve días en la unidad de cuidados intensivos del hospital Rafael Rodríguez Zambrano.
A esta casa de salud llegó después de sufrir un ataque a balazos, pero la muerte le ganó la batalla. Su deceso se registró la mañana de ayer, 17 de febrero.
Al hombre de 27 años, el pasado 30 de enero le dispararon y recibió cinco proyectiles en su cuerpo. El atentado ocurrió entre las calles J-8 y J-17, en el barrio Jocay, en Manta.
El día del atentado, Carreño iba a visitar a un familiar en el barrio Jocay cuando un vehículo de color blanco y sin placas lo interceptó. Del automotor bajaron varios sujetos que le dispararon a quemarropa por varias ocasiones.
Según el informe policial, la víctima recibió al menos cinco impactos en el abdomen y en varias partes del cuerpo.
Después de que recibió cinco balazos, lo llevaron a un hospital
Carreño quedó herido de gravedad, por lo que paramédicos lo trasladaron de urgencia en una ambulancia del Cuerpo de Bomberos hasta el hospital local. En el sitio recibió la asistencia médica.
Ese día las autoridades policiales aplicaron el denominado código plata que consiste en ubicar personal policial en la casa de salud, para salvaguardar la seguridad del lugar y de las personas que han sido víctimas de atentados.
Después que se confirmara la muerte de Giuseppe Carreño, personal de la Policía de Criminalística se trasladó hasta la casa de salud para efectuar el levantamiento del cadáver.
Miguel González, jefe de control de la policía en el distrito Manta, Montecristi y Jaramijó, señaló que la víctima estaba bajo el código plata, pero después que se confirmó su deceso su cuerpo fue trasladado hasta la morgue para la autopsia de ley.
