El Concejo Metropolitano de Quito aprobó el 17 de septiembre de 2025 la exoneración del pago de agua potable de julio para más de 89.000 hogares afectados por la rotura de la línea de conducción del sistema Mica Quito Sur, que dejó sin servicio a varias parroquias del sur de la capital.
Medida solidaria en beneficio de los hogares
La decisión beneficia a 89.284 cuentas de las parroquias La Argelia, Quitumbe, Turubamba, Guamaní, La Ecuatoriana y Chillogallo, zonas directamente impactadas por la emergencia.
Según explicó Verónica Sánchez, gerente general de Epmaps, los usuarios solo deberán cubrir los cargos fijos, quedando exentos del valor correspondiente al consumo de agua durante el mes de julio.
De igual manera, 6.123 cuentas adicionales, pertenecientes a barrios cercanos que compartieron el servicio con vecinos afectados, recibirán un descuento y no pagarán el excedente generado en ese período.
Impacto económico para Epmaps
El alcalde Pabel Muñoz destacó que la medida constituye un apoyo financiero fundamental para las familias del sur. Subrayó que “no sería lógico pagar por el servicio que no recibí”.
Muñoz también indicó que la compensación representa un impacto económico reducido para la empresa pública de agua potable. Se estima que la medida afectará en menos del 1% de la facturación anual de Epmaps.
El informe técnico presentado al Concejo precisó que la exoneración fue posible gracias a una planificación financiera previa y a la estabilidad de la empresa en materia de ingresos.
Respaldo del Concejo Metropolitano
Durante la sesión, los concejales Analía Ledesma, Diego Garrido y Diana Cruz respaldaron la propuesta, señalando que la medida responde a un criterio de justicia social ante una situación de emergencia.
Las intervenciones coincidieron en la importancia de reconocer las dificultades vividas por los barrios del sur, que afrontaron cortes prolongados y tuvieron que recurrir a la solidaridad comunitaria para abastecerse de agua.
El Concejo Metropolitano aprobó la propuesta sin mayores objeciones, consolidando un acuerdo que marca un precedente en la atención a emergencias relacionadas con servicios públicos.
Contexto de la emergencia en Quito
La rotura de la línea de conducción del sistema Mica Quito Sur se registró en julio de 2025. Lo que afectó el suministro en extensas zonas urbanas del sur de la ciudad.
Durante varios días, miles de familias enfrentaron dificultades para acceder al agua potable. La mayoría dependía de cisternas móviles y de la cooperación entre vecinos para cubrir necesidades básicas.
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La situación generó reclamos ciudadanos, pero también motivó respuestas rápidas desde la municipalidad y la empresa prestadora del servicio para contener los efectos de la crisis.
Perspectivas a futuro
El municipio informó que se mantiene un plan de monitoreo sobre la infraestructura del sistema de agua potable para evitar fallas similares en el futuro.
Además, se implementarán proyectos de mantenimiento preventivo y reforzamiento de las líneas de conducción. Esto con el objetivo de garantizar un suministro más seguro y continuo para los sectores vulnerables de la ciudad.
Las autoridades locales subrayaron que esta medida solidaria no solo representa un alivio económico inmediato. Además de un compromiso institucional con la calidad de los servicios básicos en Quito.