El ministro de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, respondió al expresidente Rafael Correa con una fotografía de la nueva cárcel en Santa Elena. El viernes 8 de agosto de 2025, Luque desafió a Correa a regresar a Ecuador, asegurando que su “hospedaje” ya estaba garantizado.
Esta respuesta se produjo después de que el exmandatario lo acusara de corrupción en contratos eléctricos. Luque afirmó que la nueva prisión, conocida como cárcel de ‘El Encuentro’, está diseñada pensando en la comodidad de los “verdaderos corruptos” y compartió su avance.
Respuesta directa a acusaciones de corrupción
El cruce de mensajes comenzó cuando Rafael Correa acusó a Luque y a la ministra de Energía, Inés Manzano, de corrupción. El expresidente sugirió que ambos funcionarios deberían estar presos por los contratos fallidos con las empresas Progen y Atm. Estos contratos causaron un perjuicio de 120 millones al Estado.
A través de la red social X, Correa escribió que, en un país con Estado de derecho, Luque y Manzano ya estarían en la cárcel. Además, destacó que la corrupción no se puede ocultar, y arremetió contra el Gobierno.
Luque, por su parte, reaccionó de manera irónica, invitando a Correa a regresar al país para verificar el destino de los corruptos. El ministro adjuntó a su mensaje una imagen del avance de la cárcel, la cual hasta julio de 2025 tenía un progreso del 30%. Luque ha deslindado su responsabilidad en el caso Progen, argumentando que solo visitó la fábrica y dio lineamientos, pero no firmó los contratos. Este cruce de acusaciones se enmarca en la constante confrontación entre el Gobierno y el expresidente, que vive en Bélgica.
Cárcel de ‘El Encuentro’ avanza en Santa Elena
El nuevo centro de reclusión, nombrado cárcel de ‘El Encuentro’, es un proyecto gubernamental que se construye en la provincia de Santa Elena. Su diseño se inspira en el modelo carcelario de Bukele, implementado en El Salvador. La fotografía compartida por el ministro Roberto Luque muestra el avance de la obra.
El ministro aseguró que la prisión está pensada para la “comodidad” de los corruptos. El Gobierno ha priorizado la construcción de nuevas cárceles para enfrentar la crisis de seguridad que afecta al país, una de las principales promesas de la administración.
Rafael Correa, exiliado en Bélgica desde 2017, tiene una condena de ocho años de cárcel por corrupción en el caso Sobornos. A pesar de su ausencia, el expresidente mantiene una intensa actividad en redes sociales. Desde allí, critica al Gobierno y a sus oponentes.
La respuesta del ministro Luque escaló la confrontación, usando la nueva infraestructura penitenciaria como un símbolo de la lucha contra la corrupción. Esta dinámica de acusaciones y respuestas públicas se ha vuelto una constante en el panorama político del Ecuador. El caso de los contratos eléctricos sigue bajo investigación.