Los cuatro miembros del Frente Atlético que colgaron en enero de 2023 un muñeco en un puente con una camiseta del jugador del Real Madrid, Vinícius Júnior, pactaron con el fiscal penas de hasta 22 meses de prisión al reconocer que incurrieron en un delito de odio y otro de amenazas.
El juicio contra los cuatro acusados por estos hechos se retomó este lunes 16 de junio. Tuvo la ratificación de un acuerdo de conformidad y la lectura de la sentencia condenatoria. Los jóvenes firmaron una carta de disculpas dirigida a Vinícius Júnior, Real Madrid, LaLiga y RFEF. El acuerdo consiste respecto a uno de los acusados en quince meses de prisión por un delito de odio y siete meses adicionales por un delito de amenazas, al haber difundido por internet imágenes de la acción, amplificando su impacto.
Mutas por racismo contra Vinícius Júnior
Los otros tres procesados aceptan siete meses de prisión por delito de odio y siete meses por amenazas. Al primero de ellos se le impuso, además, una multa de 1.258 dólares. Mientras que a los tres restantes una multa de 836 dólares. Además, se les impone la prohibición de acercamiento a menos de mil metros de Vinícius, de su domicilio y lugar de trabajo en la Ciudad Deportiva Valdebebas.
También se les prohíbe aproximarse a menos de mil metros de todos los estadios durante la celebración de los partidos de fútbol que disputen según el calendario de la Liga de Fútbol Profesional y las competiciones que organice la Federación Española de Fútbol. De igual modo, se les inhabilita para ejercer profesiones u oficios educativos en los ámbitos docente, deportivo y de tiempo libre. Dicha sanción es de cuatro años y 3 meses para el acusado que difundió por internet las imágenes. Mientras que, de tres años y 7 meses para los restantes.
Todos los acusados firmaron una carta de disculpas dirigida a Vinícius Júnior, Real Madrid, LaLiga y RFEF, que les sirvió para que se les reconociera la atenuante de reparación del daño También deberán participar en un programa formativo en materia de igualdad de trato y no discriminación para que se suspendan las penas de prisión impuestas.
LaLiga destacó que esta sentencia supone «un paso firme en la lucha contra el odio y la discriminación en el deporte». Reiteró su «compromiso inequívoco por erradicar cualquier forma de racismo, violencia o intolerancia dentro y fuera de los estadios».
Odio por su color de piel
El proceso arrancó el pasado 19 de mayo con la declaración por videconferencia del brasileño. Este manifestó que lo sucedido fue por racismo debido a su «color de piel» y por «odio a su persona», lo que atentó contra su honor.
La Sección 23 fijó este lunes la audiencia para la celebración de las cuestiones previas. En las alegaciones, las partes alcanzaron un acuerdo ante la prueba de cargo que les incriminaba, entre ellas imágenes de cámaras de videovigilancia de un bar al que fueron después de los hechos. La causa se inició a raíz de una denuncia presentada por LaLiga, que se personó en el procedimiento desde el primer momento como acusación.
El fiscal solicitaba cuatro años de cárcel para los procesados por un delito contra los derechos fundamentales y libertades públicas, en su modalidad contra la dignidad, y otro de amenazas. La acusación particular que representa al Real Madrid y al jugador se sumó al escrito del fiscal.
Al mismo tiempo el fiscal reclama una indemnización en concepto de responsabilidad civil de $6.966 por los daños morales causados al jugador. Según el escrito de acusación, los cuatro jóvenes eran integrantes del grupo «ultra» conocido como Frente Atlético, «identificado ideológicamente con la extrema derecha».
Hechos juzgados
Así, en la madrugada del 25 al 26 de enero de 2023, antes de que diera comienzo el partido de fútbol de Copa del Rey que se iba a disputar en estadio Santiago Bernabéu entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid, los acusados se dirigieron a un puente en la carretera M-11, dirección Valdebebas, situado en las inmediaciones la ciudad deportiva del Real Deportiva del Real Madrid.
Una vez allí, procedieron a colgar con una cuerda un maniquí, de una altura de unos 165 cm, de color de piel y pelo negro. Este portaba una camiseta del equipo de fútbol Real Madrid, con el nombre en la parte posterior del jugador Vinícius Júnior. Tenía su dorsal, al que simbolizaba, y unas piedras a modo de peso atadas con cinta aislante en lo que representaría sus tobillos.
Asimismo, colgaron en el referido puente una pancarta de tela, de color rojo, con letras pintadas en blanco con el lema «Madrid odia al Real». Tenía una medida de 12,90 metros de longitud y 1,70 m. de ancho.
Una publicación contra Vinícius Júnior
Posteriormente, Á. B. R., «a modo de reivindicación y justificación de la acción que habían desplegado de forma coordinada los cuatro acusados», publicó instantes después a través de la cuenta que administraba en la red social X (antes Twitter) donde contaba con 1.223 seguidores, una primera fotografía del puente donde aparecía la pancarta y el muñeco colgado, que alcanzó hasta las 18.000 reproducciones.
La publicación se hizo viral por la publicidad alcanzada en redes sociales y donde logró una importante difusión. Llegó incluso a hacerse eco de la noticia los medios de comunicación tradicionales. «Incrementando así la lesión al bien jurídico protegido consistente en la dignidad de la persona» en este caso tanto de la víctima, como del colectivo al que representa, según la defensa.
Del mismo modo, el acusado publicó una segunda fotografía donde aparecía la muñeca hinchable en el momento de los preparativos, con la camiseta de Vinícius Júnior apoyada junto a una pared, incorporándolo al hastag #TodosSomosVini, incrementando así el menosprecio hacia esa persona, «ya que era empleado para mostrar el apoyo a la víctima y la repulsa a la acción desplegada».