El secreto detrás de las pupusas, el plato más querido por los salvadoreños

Las pupusas, plato emblemático de El Salvador, combinan tradición, sabor y versatilidad. Su popularidad crece en el mundo, atrayendo a turistas y amantes de la gastronomía.

•‎

4 minutos de lectura
¿Por qué las pupusas conquistan paladares dentro y fuera de El Salvador?
¿Por qué las pupusas conquistan paladares dentro y fuera de El Salvador?
¿Por qué las pupusas conquistan paladares dentro y fuera de El Salvador?
¿Por qué las pupusas conquistan paladares dentro y fuera de El Salvador?

Gabriela Mantuano

Redacción ED.

Gabriela Mantuano

Redacción ED.

Nací en Manta, Manabí, el 24 de julio de 1989. Licenciada en Ciencias de la Comunicación en la UL... Ver más

Las pupusas, declaradas Plato Nacional de El Salvador desde 2005, son una preparación a base de masa de maíz o arroz rellena con queso, frijoles, chicharrón u otros ingredientes, cocinada en comal. Este platillo, con raíces prehispánicas y profundas conexiones culturales, se consume en todo el país y ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un referente gastronómico para la comunidad salvadoreña en el exterior.

Origen e importancia cultural

El origen de este plato se remonta a épocas precolombinas, cuando comunidades indígenas pipiles ya elaboraban tortillas rellenas. Con el tiempo, la receta se enriqueció con ingredientes introducidos tras la colonización, manteniendo su preparación artesanal.

En 2005, la Asamblea Legislativa salvadoreña oficializó a las pupusas como Plato Nacional y estableció el segundo domingo de noviembre como el Día Nacional de la Pupusa. Esta fecha es celebrada con ferias gastronómicas y concursos en todo el territorio, promoviendo la identidad cultural y turística del país.

Las pupusas son también un símbolo de encuentro social. Se consumen en pupuserías, ferias, plazas y mercados, y forman parte de celebraciones familiares y comunitarias.

Ingredientes y preparación tradicional de las pupusas

La base de las pupusas es una masa de harina de maíz nixtamalizada o, en algunas regiones, de arroz. La masa se rellena con ingredientes como:

  • Queso (quesillo salvadoreño o mozzarella)
  • Frijoles refritos
  • Chicharrón molido
  • Mezclas como pupusa “revueltas” (queso, frijoles y chicharrón)

Para elaborarlas, se forma una bola de masa, se coloca el relleno en el centro, se cierra y se aplana hasta obtener un disco de aproximadamente 10 centímetros de diámetro. Luego, se cocinan en un comal caliente hasta que adquieren un dorado característico.

El acompañamiento tradicional incluye curtido de repollo (repollo rallado, zanahoria, cebolla, vinagre y orégano) y salsa de tomate suave.

Variedades y proyección internacional

Si bien la pupusa clásica es de maíz, existen variantes como las de arroz, típicas de Olocuilta, o las gourmet, con rellenos como camarón, espinaca o jalapeños. También han surgido versiones adaptadas a dietas específicas, como pupusas sin gluten o veganas.

En el exterior, las pupusas se han popularizado en ciudades con presencia significativa de migrantes salvadoreños, como Los Ángeles, Houston, Washington D.C. y Toronto. Restaurantes y festivales gastronómicos las han convertido en embajadoras culinarias de El Salvador, atrayendo a un público cada vez más amplio.

Incluso, en 2007, la pupusa fue incluida en la lista de “50 mejores comidas del mundo” de CNN Travel, reforzando su reputación global.

Valor nutricional y consumo responsable

Una pupusa promedio aporta carbohidratos, proteínas y grasas, dependiendo de su relleno. Por ejemplo, una pupusa de queso puede contener entre 300 y 350 calorías. Si bien es un alimento nutritivo, especialistas recomiendan moderar su consumo y acompañarlo con vegetales y bebidas naturales para mantener el equilibrio dietético.

El uso de masa nixtamalizada aporta calcio y fibra, mientras que los rellenos de origen vegetal o proteínas magras pueden mejorar su perfil nutricional.

Atractivo turístico y económico

El sector gastronómico salvadoreño ha encontrado en las pupusas un atractivo turístico de primer nivel. Localidades como Olocuilta y Antiguo Cuscatlán son conocidas por sus pupuserías y ferias, que atraen a miles de visitantes nacionales y extranjeros.

Este platillo también impulsa la economía local, generando ingresos para pequeños negocios, productores agrícolas y artesanos que fabrican comales, utensilios y mobiliario para pupuserías.

Pupusas, patrimonio gastronómico vivo

Las pupusas no son solo un alimento: representan una tradición que une generaciones y fortalece el sentido de pertenencia. Su expansión internacional y su presencia en eventos culturales han convertido este platillo en un puente entre El Salvador y el mundo.

El reto de las nuevas generaciones es conservar la esencia artesanal de la preparación, adaptándola a las tendencias alimentarias y manteniendo viva la identidad que las pupusas representan para la cultura salvadoreña.

SÚMATE AL NEWSLETTER

Recibe todos los días el ranking de las noticias más importantes.

ÚLTIMAS NOTICIAS

Edición impresa

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

ÚLTIMAS NOTICIAS

Edición impresa

Noticias en la web

SÚMATE AL NEWSLETTER

Recibe todos los días el ranking de las noticias más importantes.

Edición impresa

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

¡Noticias al instante!

Entérate de lo más importante, al momento.

1$us/mes

No te pierdas nada OFERTA RELÁMPAGO