La cantante internacional Katy Perry y la productora de su videoclip ‘Lifetimes’ enfrentaron una sanción económica de más de seis mil dólares. El motivo fue la filmación realizada en las dunas protegidas del islote S’Espalmador, dentro del Parque Natural de Ses Salines en Ibiza.
La grabación se efectuó sin los permisos oficiales necesarios, específicamente a finales de julio de 2024. El equipo invadió zonas restringidas delimitadas por postes y cuerdas para preservar la biodiversidad.
Las autoridades de Mallorca confirmaron que, a pesar de la infracción, no se causaron daños ambientales, por lo que el expediente se catalogó como falta grave y no delito ambiental. Esto permitió que la multa se mantuviera en el mínimo legal, ascendiendo a 6,000 dólares. La empresa productora implicada, WeOwnTheCity, pagó la sanción en febrero del 2025 para cerrar el caso, tras ser notificada formalmente.
Controversia y permisos en la grabación del videoclip
Desde el sello Capitol Records, se afirmó que una productora local les aseguró que contaban con todas las autorizaciones. Sin embargo, luego se aclaró que solo tenían un permiso verbal que aún estaba en trámite. La incorrecta gestión de permisos provocó un revuelo público y mediático, ya que el rodaje invadió zonas que estaban claramente señalizadas para impedir el acceso con el fin de proteger ecosistemas sensibles.
El videoclip de ‘Lifetimes‘, estrenado en septiembre del 2024, es el segundo sencillo del esperado álbum Ethereal de Katy Perry. La producción visual mostró imágenes grabadas en el islote de S’Espalmador, reconocido por su frágil sistema dunar y su protección ambiental desde 1980. Más de dos millones de personas han visto el video, que aunque lindo estéticamente, despertó preocupación por el impacto ambiental y la legalidad de la filmación.
Características del videoclip y mensaje artístico de Katy Perry
A diferencia de sus producciones previas festivas y coloridas, ‘Lifetimes’ presenta una balada introspectiva y minimalista donde Katy Perry reflexiona sobre los vínculos que trascienden la vida.
La canción y el video simbolizan un proceso personal profundo, relacionado con la maternidad y la espiritualidad, marcado por una producción sobria y emotiva. El audiovisual combina imágenes en el islote con escenas de un ambiente mediterráneo, generando una postal veraniega que, sin embargo, ha quedado marcada por la polémica de la multa.