Las Áreas Territoriales Inclusivas (ATI) del Municipio de Guayaquil atienden a 550 niños, niñas y adolescentes con discapacidades y necesidades pedagógicas en 2025, ofreciendo terapias gratuitas que en el sector privado superarían los USD 1.000 mensuales. El programa, liderado por la Dirección de Inclusión Social (DIS), ha registrado 38.000 atenciones en lo que va del año.
El caso de Susana Agurto
Susana Agurto, viuda y madre de un adolescente de 13 años con autismo, recurre al ATI Puerto Liza desde febrero. Su hijo recibe cuatro terapias semanales, valoradas en USD 100 cada una en centros privados. “A veces no hay los recursos, sabemos los momentos en que estamos viviendo y nos toca estar promediando un presupuesto que no alcanza. Mi hijo está en octavo año y aquí ha avanzado mucho”, señaló Agurto, residente de la 11 y Oriente.
Este ahorro ha permitido a la familia cubrir otras necesidades básicas, en un contexto de limitaciones económicas. Su caso refleja la situación de cientos de hogares de Guayaquil que enfrentan gastos adicionales en salud, educación y transporte.
Costo y ahorro para las familias
Amanda Arboleda, directora de la DIS, explicó que el costo real del servicio que se entrega oscila entre USD 500 y 1.000 mensuales por cada menor atendido. “El paquete que nosotros entregamos es completo. Varía según la necesidad de los niños, niñas y adolescentes que acuden a nuestros servicios. Una familia está ahorrándose un promedio de USD 1.000 mensuales gracias a este servicio municipal”, puntualizó.
Las terapias incluyen lenguaje, psicopedagogía, psicología, terapia física y terapia artística. Todas se brindan en instalaciones municipales y con profesionales capacitados.
Beneficiarios identificados en barrios
Muchos de los usuarios forman parte del Registro Social Municipal, que localiza barrio por barrio a personas con discapacidad. Actualmente funcionan seis ATI en los sectores de Guasmo Lídice Aldás, Trinitaria, Puerto Liza, Sergio Toral y Orquídeas.
La DIS anunció además la apertura de tres nuevas sedes en la calle 29 y Soledad Rodríguez (Oriente), en Samanes (que reemplazará a Orquídeas) y en Paraíso de la Flor. Todas están en proceso de inscripción y empezarán a funcionar en los próximos meses.
Proyección para 2025
El plan municipal contempla expandir el alcance de los ATI hacia las zonas rurales del cantón. Se proyecta la apertura de dos nuevos centros en Posorja y Puná antes de que finalice 2025, con lo cual se busca atender a comunidades alejadas que carecen de servicios especializados.
El propósito es consolidar un sistema de atención gratuito y sostenible, capaz de reducir la brecha en el acceso a terapias de calidad.
Testimonios de beneficiarios
Candy Pacheco, habitante del Suburbio, relató su experiencia con el ATI Puerto Liza. Su hijo de 5 años fue diagnosticado con autismo en el Hospital de Neurociencias. Desde marzo acude dos veces por semana a terapias municipales. “De marzo hasta hoy, mi hijo habla ya, mi hijo no hablaba, solo decía mamá, papá y agua. Ahora ya comienza a hablar. Solo en esta semana que he estado en el Hospital de Neurociencias he ahorrado USD 700 y en consultas son USD 75”, explicó.
Casos como el de Pacheco ilustran el impacto del programa en la reducción de gastos médicos y en el progreso de niños con dificultades de aprendizaje o comunicación.
Política social municipal
Los ATI forman parte de la política social del Municipio de Guayaquil, orientada a brindar servicios de inclusión sin costo. Según datos oficiales, los beneficiarios provienen en su mayoría de hogares en situación de vulnerabilidad, lo que convierte a estos espacios en una herramienta para aliviar la carga financiera de las familias.
El Municipio prevé continuar con la consolidación de estos centros durante el próximo año, incorporando nuevas áreas de atención y fortaleciendo la capacitación de su personal técnico.