Los proveedores de materiales de construcción en Portoviejo ven en el proyecto del centro comercial Portoshops una oportunidad económica indirecta más que directa. La obra de $100 millones, que construirá el Consorcio Portoshops conformado por La Favorita y Condado Shopping, generará aproximadamente 3.500 empleos según Portovivienda. Pero, los comercios locales estiman captar solo el 15% de la inversión total debido a que las grandes constructoras ya tienen contratos establecidos con cadenas de suministro nacionales.
Expectativas moderadas del sector constructor local
Andreína Chávez, de la distribuidora de materiales de construcción Aliatis, explicó que la inversión destinada a la compra de materiales en comercios locales representa una fracción pequeña del costo total de este tipo de proyectos. “Hay que considerar que ellos ya tienen su jefe de compras que ha hecho el negocio con alguna cadena, con tiempo. Y esas cadenas también tienen su jefe de compra que si saben que no van a poder con el stock total, ellos diversifican la compra a proveedores”, indicó Chávez.
La ejecutiva de Aliatis estimó que el comercio del cantón se beneficiará solo con el 15% de los $100 millones que cuesta este proyecto. “Nosotros conversamos con los responsables del proyecto, llevamos nuestros precios y los presentamos, pero nos dijeron que el proyecto está finiquitado con x cadena, entonces a nosotros lo que nos queda es llamarlas para ofrecerles nuestros servicios”, añadió.
El verdadero impacto de Portoshop: generación de empleo
Angello Mujica, administrador del almacén de hierro DIPAC en Portoviejo, coincidió en que la “ganancia mayor” para todo el comercio del cantón será la generación de empleos. Según la empresa municipal Portovivienda, la ejecución de este proyecto generará aproximadamente 3,500 empleos.
“No se puede establecer cuánto material de construcción comprará en Portoviejo la empresa que construirá esa edificación. Lo único que puedo decir es que nosotros tenemos el stock suficiente como para solventar cualquier requerimiento que tengan los dueños de la obra”, aseguró Mujica.
Circulación económica a través de la mano de obra
Las expectativas del sector no se centran en las compras directas que puedan hacer los distribuidores de materiales de construcción, ferreterías u otros negocios del ramo, sino en el circulante que generará la mano de obra, precisó Mujica. “Lo bueno es que el flujo de dinero, que son más de $100 millones, no todo lo vamos a captar aquí en Portoviejo, pero sí una gran parte va a beneficiar a toda la ciudadanía, desde el pintor, el maestro de obras, dueños de maquinaria”.
El ejecutivo explicó que esa población tendrá ingresos y a corto plazo contará con recursos para invertir en proyectos personales como arreglar sus casas y ampliar sus negocios. “Es ahí donde nosotros ganamos, porque ellos sí van a comprar en negocios locales”, indicó.
Portoshops: perspectiva técnica del sector
Fabricio Villavicencio, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Manabí, coincidió con este criterio. Según Villavicencio, un proyecto de envergadura genera economía local desde los primeros trabajos de cambio de suelo, compactación y excavación.
“En ese momento no se ocuparía mucho recurso local, pero independiente de eso, estos vehículos van a tener que comprar combustible a una gasolinera, van a tener que comer, van a tener que dormir si es que vinieran de otro lado, entonces ahí hay dos incidencias que no necesariamente es al área de la construcción pero sí es a la parte relacionada”, explicó.
Compromiso con la economía local
El alcalde Javier Pincay ha establecido acuerdos con Portoshops para maximizar el beneficio local. Entre los compromisos está que el 95% de la mano de obra sea de Portoviejo, que los materiales de construcción se compren localmente (excepto acero y accesorios), y que se priorice la contratación de profesionales manabitas.
El proyecto, que se construirá en el parque de negocios Villanueva sobre 4.3 hectáreas con 120,000 metros cuadrados de construcción, promete ser un motor de reactivación económica para la capital manabita, aunque su impacto directo en el sector de materiales de construcción será limitado comparado con los beneficios indirectos del empleo generado.