El Refugio de Vida Silvestre (RVS) Machay fue oficialmente declarado como la 79ª área protegida del Ecuador. La Ministra del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), María Luisa Cruz, formalizó la inclusión de este espacio en el subsistema privado del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP). Este evento ocurrió en un acto protocolar en el cantón Baños de Agua Santa, el viernes 8 de agosto de 2025. La decisión busca fortalecer la conservación de ecosistemas vitales y la biodiversidad en la provincia de Tungurahua.
Un nuevo hogar para la biodiversidad
El RVS Machay abarca una superficie de 1.164,898 hectáreas, y se localiza en las parroquias Río Verde y Río Negro. El área protege importantes ecosistemas, que sirven de hábitat para diversas especies. Los registros indican que se resguardan 17 especies de anfibios, 27 especies de mamíferos y cerca de 98 especies de aves. La designación como área protegida asegura la preservación de estas poblaciones y sus hábitats naturales. La declaratoria consolida los esfuerzos por conservar los bosques nublados, así como especies que pueden ser endémicas o que se encuentren amenazadas.
Impacto estratégico en la conservación
La integración de Machay al SNAP representa un avance estratégico para la conservación en el país. El refugio mejora la conectividad entre importantes parques nacionales. Se convierte en un corredor efectivo entre los Parques Nacionales Llanganates y Sangay, así como entre el Refugio de Vida Silvestre Cerro Candelaria y la Reserva Naturetrek. Todas estas zonas forman parte de la red de áreas protegidas de la Fundación EcoMinga, fortaleciendo el trabajo conjunto del Corredor de Conectividad Llanganates Sangay. Este esfuerzo promueve el uso sostenible de los recursos en la región y la protección del patrimonio natural.
Compromiso con el futuro y las comunidades
La declaratoria consolida estrategias de conservación a largo plazo. Mejora, además, el manejo técnico del área y optimiza los mecanismos de sostenibilidad financiera. También contribuye a las metas nacionales de conservación, especialmente las establecidas en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). El Gobierno Nacional, a través de estas acciones, fortalece el desarrollo de las comunidades locales y de sus organizaciones. Impulsa la conservación y la protección del patrimonio natural, demostrando un compromiso con el futuro ambiental y social del Ecuador.