Un manabita y su novia fueron ajusticiados. Familiares creen que los confundieron



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Un manabita y su novia, oriunda de Santo Domingo, fueron cruelmente ajusticiados luego de haber salido de una fiesta.

La noche del sábado y la madrugada del domingo 1 de octubre la pareja farreó, sin imaginar que eran sus últimas horas de vida.

Angélica Carolina Erazo Vera y su novio, el manabita Cristian Ibarra, habían disfrutado de una velada de diversión por el reinado del recinto La Valencia.

Este sector pertenece a El Carmen y limita con la parroquia Puerto Limón, de Santo Domingo de los Tsáchilas.

Cuando la pareja de novios regresaba a Santo Domingo, donde ambos vivían, encontraron la muerte.

Angélica y Cristian eran la pareja que la mañana del lunes fue hallada sin vida en medio de una plantación de plátano.

Ambos cadáveres estaban a un costado de la vía de segundo orden y que conduce a La Valencia.

Sus cuerpos estaban parcialmente calcinados y los lugareños habían manifestado que escucharon cinco disparos al caer la tarde del domingo.

Dolor, impotencia e indignación es lo que siente la familia de Angélica, de 37 años de edad, oriunda de Santo Domingo.

Ellos se enteraron  de aquella tragedia viendo fotos y videos que circulaban en las redes sociales.

Al principio no estaban seguros de si se trataba de ella hasta el mediodía del lunes, cuando llegaron al lugar a reconocer los cuerpos a la morgue.

Una hermana de Angélica fue quien la identificó.

Ella contó que su hermana con el manabita Cristian Ibarra, de 22 años, mantenían una relación, y que habían ido a una fiesta al mencionado recinto.

Aunque los vecinos manifestaron desconocer lo ocurrido a la pareja, familiares de la occisa hablan de un posible linchamiento con muerte.

Por eso afirman que se pudo tratar de un malentendido o que los confundieron con otras personas.

La hermana de Angélica vive en La Valencia, y mencionó que a su pariente algunos sí la conocían.

“Mi hijo estuvo por ahí (escena del crimen), presenció que estaban rodeados por la gente y escuchó que alguien dijo: ‘Déjenlos que se vayan, porque no han robado nada’. Incluso los llevarían en un carro rojo, para que se vayan, pero no sabemos qué pasó después, porque los encontraron muertos”, expresó la doliente.

Ella dijo que denunciará el caso para esclarecer la muerte y dar con los responsables.

En la vía se encontraron restos de cabello, aparentemente de la mujer. Personal de Criminalística de El Carmen llegó para hacer las pericias.

Ella era madre de tres hijos de 11, 15 y 17 años. Todos de un compromiso anterior. Vivía en la lotización Los Unificados.

Por su parte, allegados de Cristian llegaron desde Flavio Alfaro, de donde era oriundo, para llevar su cadáver a su tierra natal.

El manabita tenía apenas cuatro meses en Santo Domingo, “no estaba comprometido, solo estaban saliendo”, dijo un tío.

Él deja un hijo de un año y tres meses.