Eduardo Miño Naranjo, integrante del emblemático dúo de los hermanos Miño Naranjo, falleció este jueves 12 de junio de 2025, según confirmó su familia. Su deceso representa una pérdida profunda para la música popular ecuatoriana, donde dejó una huella imborrable junto a su hermano al interpretar por más de seis décadas canciones que hoy forman parte del patrimonio cultural del país.
Un legado de 68 años de historia musical
El dúo Miño Naranjo, originario de Ambato, es considerado uno de los pilares de la música nacional ecuatoriana. Desde hace 68 años, Eduardo y su hermano ofrecieron su voz y talento en escenarios nacionales e internacionales, llevando en alto la música tradicional.
Entre sus interpretaciones más recordadas están “El Aguacate”, “Invernal” y “Tú y Yo”, temas que han sido parte de innumerables eventos culturales, serenatas, festivales y momentos familiares a lo largo de generaciones.
El fallecimiento de Eduardo Miño Naranjo ha generado múltiples muestras de pesar en redes sociales y mensajes de condolencia por parte de artistas, instituciones culturales y seguidores.
Reconocimiento a su trayectoria
A lo largo de su carrera, los hermanos Miño Naranjo han recibido reconocimientos por su valiosa contribución a la difusión de la música ecuatoriana, especialmente dentro del género pasillo. Su arte no solo emocionó al público nacional, sino que también se ha apreciado entre las comunidades ecuatorianas en el extranjero.
Han recibido galardones con múltiples distinciones culturales a nivel nacional, incluyendo homenajes por parte del Ministerio de Cultura y Patrimonio, la Casa de la Cultura Ecuatoriana y gobiernos locales.
Su música se considera un puente intergeneracional, que ha permitido mantener vivas las raíces musicales del país.
Reacciones tras fallecimiento de Eduardo Miño Naranjo
Instituciones culturales han expresado sus condolencias y recordado el aporte del artista a la historia musical del país.
Varios colegas del medio artístico han destacado no solo el talento de Eduardo, sino también su humildad y compromiso con la difusión de la cultura ecuatoriana.
Se espera que en los próximos días se realicen actos conmemorativos y homenajes públicos en diferentes ciudades del país.
La música nacional pierde una voz, pero gana un símbolo eterno
Con la partida de Eduardo Miño Naranjo, Ecuador despide a un referente de su identidad sonora. Sin embargo, su voz permanecerá viva en cada interpretación de los pasillos que marcaron época, en cada disco, en cada memoria que lo evoque.
El nombre de Eduardo, junto al de su hermano, queda inscrito en la historia como símbolo de entrega, pasión y defensa de la música tradicional.