En un acto significativo, Evita, una adulta mayor de 77 años, oriunda de la provincia de Bolívar, obtuvo por primera vez su cédula de identidad el 20 de junio del año en curso. El trámite se realizó en la agencia del Registro Civil de Guaranda, culminando un proceso vital para su reconocimiento como ciudadana.
La importancia de la identificación
La obtención de este documento representa un paso crucial para Evita. La cédula de identidad no es solo un papel, sino la llave a derechos fundamentales. Permite el acceso a servicios de salud, programas sociales y pensiones. Evita expresó su alegría y gratitud al personal de la agencia por la atención recibida. “Nunca pensé que llegaría este día”, manifestó emocionada. Agregó que ahora se siente reconocida y feliz de poder acceder a beneficios antes inaccesibles.
Compromiso con la inclusión ciudadana
Este caso subraya el esfuerzo conjunto de las instituciones estatales y la comunidad. Buscan asegurar que ningún ciudadano quede excluido del sistema de identificación nacional. La Dirección General de Registro Civil, Identificación y Cedulación trabaja constantemente en campañas de cedulación. Estas se enfocan en zonas rurales y de difícil acceso. Allí, muchas personas no han sido registradas oficialmente por diversas razones. Estas acciones son parte de una política pública. Su objetivo es reducir las brechas de desigualdad y garantizar una identidad legal para todos los ecuatorianos.
Articulación interinstitucional clave
Además, se han coordinado esfuerzos con gobiernos locales, juntas parroquiales y líderes comunitarios. Ellos identificaron casos como el de Evita. La coordinación interinstitucional acercó los servicios del Estado. Han llegado a quienes más los necesitan. Desde el Registro Civil, se reafirma el compromiso de seguir trabajando con responsabilidad.
Buscan que todos los ecuatorianos, sin importar su edad, origen o condición, ejerzan plenamente su ciudadanía. Este logro de Evita resalta el impacto positivo de estas iniciativas en la vida de las personas.