El Papa Francisco falleció a los 88 años en la Casa Santa Marta, Vaticano, desencadenando un cónclave para elegir al próximo pontífice. Un proceso crucial para los 1.300 millones de católicos que busca un líder para guiar a la Iglesia en tiempos de cambio.

El fallecimiento del Papa Francisco, anunciado por el cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell, marca el fin de un pontificado de 12 años caracterizado por su enfoque en la justicia social y las reformas eclesiásticas. Ahora, el Vaticano enfrenta la tarea de seleccionar un nuevo líder en un cónclave que reunirá a 138 cardenales electores menores de 80 años. Este proceso, regido por normas estrictas, se llevará a cabo en la Capilla Sixtina entre 15 y 20 días después de la muerte del pontífice, según la tradición vaticana.

El cónclave es un evento secreto donde los cardenales votan hasta que un candidato obtenga dos tercios de los votos. Las papeletas se queman tras cada ronda: el humo blanco señala la elección del nuevo Papa, mientras que el humo negro indica que no se alcanzó consenso. Actualmente, el Colegio Cardenalicio cuenta con 252 miembros, de los cuales 110 fueron nombrados por Francisco, lo que podría influir en la elección de un sucesor alineado con su visión progresista.

Entre los nombres destacados como posibles sucesores, expertos y medios especializados, como The College of Cardinals Report, señalan a varios cardenales con trayectorias relevantes. Aunque el proceso es impredecible, los candidatos más mencionados reflejan la diversidad geográfica y doctrinal de la Iglesia.

Principales candidatos a suceder al Papa Francisco

Luis Antonio Tagle, filipino de 67 años, es prefecto del Dicasterio para la Evangelización y una figura progresista. Conocido por su carisma y defensa de la inclusión, Tagle es cercano a la línea del Papa Francisco. Su origen asiático podría marcar un hito, ya que nunca ha habido un Papa de Asia.

Pietro Parolin, italiano de 70 años, es el actual secretario de Estado del Vaticano. Su experiencia diplomática, incluyendo negociaciones con China, lo posiciona como un candidato moderado con fuerte influencia en la Curia romana. Parolin es visto como una opción para garantizar estabilidad.

Matteo Zuppi, también italiano, de 69 años, es arzobispo de Bolonia y presidente de la Conferencia Episcopal Italiana. Vinculado a la Comunidad de Sant’Egidio, Zuppi destaca por su compromiso con la paz y los más vulnerables, alineándose con el enfoque pastoral de Francisco.

Otros nombres relevantes

Peter Turkson, de Ghana, con 76 años, es otra figura destacada. Su enfoque en la justicia social y el medio ambiente lo convierte en un candidato para quienes buscan un Papa africano, un continente clave para el futuro de la Iglesia. Turkson sería el primer Papa negro en la historia.

Péter Erdő, húngaro de 72 años, preside el Consejo de Conferencias Episcopales de Europa. Con un perfil más conservador, Erdő es conocido por su capacidad de diálogo y podría atraer a quienes buscan un retorno a posturas tradicionales.

En América Latina, cardenales como Carlos Aguiar Retes y Francisco Robles Ortega, ambos mexicanos de 75 años, han sido mencionados, aunque no figuran entre los favoritos. En Europa, nombres como Willem Eijk (Países Bajos) y Raymond Leo Burke (EE. UU.) representan corrientes conservadoras. Lo cierto es que el sucesor del Papa Francisco puede salir de uno de estos nombres.

Contexto del Cónclave para elegir al nuevo Papa

El cónclave de 2025 será el más concurrido de la historia, con 135 cardenales electores tras el último consistorio del Papa Francisco. La elección no solo definirá el liderazgo espiritual de la Iglesia. También su dirección en temas como la inclusión, el cambio climático y el diálogo interreligioso. Francisco dejó un legado de apertura, pero la división entre sectores progresistas y conservadores podría influir en las deliberaciones.

El proceso comenzará con una misa matutina en la Basílica de San Pedro, seguida del encierro de los cardenales en la Capilla Sixtina. Allí permanecerán incomunicados. La frase “extra omnes” marcará el inicio de las votaciones, asegurando la confidencialidad. Una vez elegido, el nuevo Papa se presentará desde el balcón de San Pedro con las palabras: “Habemus Papam”.

Preparativos y expectativas

La elección del próximo pontífice será un momento definitorio para la Iglesia Católica, que enfrenta retos como la secularización y las tensiones internas. Aunque los cardenales nombrados por Papa Francisco dominan el cónclave, la naturaleza secreta del proceso deja abierta la posibilidad de sorpresas.