La presidenta de la Asamblea Nacional de Ecuador, Viviana Veloz, desmintió una denuncia por presunto delito de rebelión presentada por el movimiento ADN, relacionada con la primera sesión del nuevo periodo legislativo programada para el 14 de mayo. Veloz aseguró que se han otorgado todas las facilidades para garantizar el desarrollo de la sesión en el Palacio Legislativo, descartando cualquier intento de obstrucción. La denuncia, según la titular, carece de fundamento legal y busca desestabilizar el proceso democrático.
El conflicto surge tras un oficio enviado el 7 de mayo por la asambleísta electa de ADN, Anabella Azín, madre del presidente Daniel Noboa, quien solicitó militarizar el Palacio Legislativo durante la sesión. Veloz rechazó el pedido, argumentando que la seguridad del recinto está a cargo de la Policía Nacional, mediante la Escolta Legislativa. No obstante, autorizó el ingreso de la cápsula de seguridad de Azín para garantizar su protección.
Facilidades para la sesión legislativa
La presidenta de la Asamblea, perteneciente al movimiento Revolución Ciudadana (RC), enfatizó que se han tomado todas las medidas necesarias para que la sesión de instalación transcurra con normalidad. Durante esta jornada, se elegirán las nuevas autoridades legislativas, un proceso que Veloz espera se desarrolle con “espíritu democrático” y cuyo resultado sea respetado por todas las bancadas.
La denuncia por rebelión, presentada por ADN ante la Fiscalía, alega un supuesto intento de impedir el normal funcionamiento de la Asamblea. Sin embargo, Veloz calificó la acusación como “temeraria” y aseguró que no existen indicios de acciones que busquen alterar el orden institucional. “La Asamblea está lista para trabajar en beneficio del país”, afirmó.
Contexto de la presunta rebelión
El nuevo periodo legislativo inicia en un contexto de tensiones políticas entre el oficialismo, representado por ADN, y las fuerzas de oposición, lideradas por el correísmo. La elección de autoridades, como el presidente o presidenta de la Asamblea, es un punto clave que definirá el equilibrio de poder en el Legislativo durante los próximos meses.
La solicitud de militarización del Palacio Legislativo por parte de Azín ha generado críticas, ya que, según Veloz, contraviene los protocolos de seguridad establecidos. La Escolta Legislativa, dependiente de la Policía Nacional, es la única entidad autorizada para resguardar el recinto, conforme a la normativa vigente.
Seguridad y democracia en el centro del debate
La negativa a militarizar el Palacio Legislativo no ha impedido que se garantice la seguridad de los asambleístas. Veloz destacó que la cápsula de seguridad de Azín podrá ingresar al recinto, cumpliendo con los procedimientos establecidos. Esta medida busca equilibrar la protección de los legisladores con el respeto a las normas institucionales.
Por otro lado, la presidenta llamó a todas las bancadas a priorizar el diálogo y el respeto durante la sesión del 14 de mayo. “El país espera que trabajemos por soluciones, no por confrontaciones”, señaló.