Un equipo de investigadores revela que los neutrófilos no solo luchan contra infecciones, sino que refuerzan la piel, abriendo caminos a nuevas terapias.
El Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) publicó un estudio en ‘Nature’ sobre los neutrófilos, las células inmunitarias que fortalecen la piel, para entender mejor la inmunidad y la salud cutánea.
El estudio, liderado por Andrés Hidalgo del CNIC, muestra que los neutrófilos, conocidos por combatir infecciones, producen matriz extracelular en la piel. Este material, rico en colágeno, refuerza la barrera cutánea contra microorganismos. Publicado en ‘Nature’, el hallazgo surge de una colaboración con equipos de Alemania, EE.UU., Singapur y China.
Tommaso Vicanolo, primer autor, explicó que estos neutrófilos actúan en condiciones normales y ante lesiones, formando estructuras protectoras alrededor de heridas. La investigación encontró que la vía TGF regula esta función: al desactivarla, la piel se vuelve más frágil y permeable, con menos matriz extracelular.
Los neutrófilos operan según ritmos biológicos. En ratones, la piel es más resistente de noche gracias a una mayor producción de matriz. “Esto sugiere que los ciclos internos influyen en la reparación de tejidos”, afirmó Hidalgo, ahora en Yale University.
Implicaciones terapéuticas para la salud de la piel
El descubrimiento podría inspirar tratamientos para enfermedades inflamatorias, diabetes o envejecimiento de la piel. “Fortalecer la barrera cutánea sería clave para pacientes con trastornos inmunológicos”, señaló Hidalgo. En España, el 10% de los mayores de 65 años tiene problemas cutáneos crónicos, según el Ministerio de Sanidad. El estudio también encontró que ratones con neutrófilos alterados tenían un 30% más de infecciones cutáneas.
Tradicionalmente, los neutrófilos se asociaban solo a la defensa inmunitaria. Este estudio amplía su rol, integrando inmunidad y estructura corporal. Investigaciones previas, como las del Instituto Pasteur en 2020, ya apuntaban a funciones adicionales de estas células, pero no a este nivel estructural.
Kerlley Ponce