Una víctima de explosión en Santo Domingo de los Tsáchilas, falleció luego de tres días de la tragedia. Gladys Magdalena Ortiz perdió la batalla contra la muerte. Ella es una de las tres mujeres que resultaron heridas en una explosión en una vivienda de la cooperativa Santa Martha, en Santo Domingo de los Tsáchilas.
Gladys y sus dos nietas sufrieron quemaduras graves. La abuelita fue trasladada al hospital Luis Vernaza en Guayaquil y las nietas al Eugenio Espejo de Quito. Según sus familiares, las jóvenes se recuperan en la capital. Gladys fue quien llevó la peor parte en la explosión.
Su madre, Rosa Isabel Hernández, entre lágrimas dijo que su hija estaba muy mal, entre la vida y la muerte y que solo les quedaba orar. Gladys se encontraba inconsciente pero luchaba por su vida. Lamentablemente no pudo más y a las 05h00 del viernes 18 de abril, dejó de existir en el hospital.
Su cuerpo fue trasladado hasta Santo Domingo. Desde el sábado en horas de la tarde se realiza la velación en la vivienda donde habitaba, en el barrio 25 de Diciembre del sector 1 de la cooperativa Santa Martha.
Despiden a víctima de explosión
La tragedia habría ocurrido el miércoles a las 06h00. Aparentemente hubo una fuga de gas y cuando Gladys se levantó a prender un interruptor, se provocó una explosión. Toda la vivienda resultó afectada. Enseres quemados y ventanas destruidas fue parte del resultado de lo ocurrido aquel fatídico día. Se trata de una infraestructura familiar, dividida en varios mini departamentos. Rosa Isabel Hernández, quien ha vivido en el sitio por más de 50 años y ha hecho la vivienda con el trabajo de toda su vida.
Con la explosión toda la casa se afectó pero la parte más perjudicada fue el mini departamento de Gladys donde vivía con sus dos nietas Alejandra López de 18 años y Fernanda Oña de 21 años. Cuando llegaron los bomberos atendieron la emergencia y trasladaron a las heridas al hospital. Por la gravedad fueron derivadas a Quito y Guayaquil. La preocupación por el estado de Gladys era grande, ahora lloran su partida.
Gladys se dedicaba a vender comida en los exteriores de la escuela ubicada al frente de su casa. Su madre Rosa Hernández llora la pérdida de una de sus hijas. Toda la familia está consternada ante esta tragedia que se llevó principalmente la vida de uno de sus seres queridos (5).