Los hermanos Byron Fernando López Villacreses y Gabriel López Villacreses, pescadores artesanales de San Mateo, llevan siete días desaparecidos.
Ellos salieron a bordo de la embarcación de fibra de vidrio “Bendición de Dios” para una faena rutinaria de pesca en altamar, pero no regresan ni responden a comunicaciones. Han pasado siete días desde su desaparición.
Esto desató temores de un atraco por delincuentes marítimos entre sus familiares. Ellos notificaron a la Armada del Ecuador para activar operaciones de rescate.
La salida sin retorno: detalles de la faena interrumpida
La partida ocurrió bajo condiciones meteorológicas estables, el 12 de septiembre de 2025 hace siete días. Salieron desde el muelle de San Mateo, un enclave tradicional de la pesca artesanal en Manta. La “Bendición de Dios”, una fibra de vidrio equipada con motor fuera de borda cargada con provisiones para una jornada de máximo tres días ya que navegaría en aguas cercanas a 20 millas náuticas de la costa.
Los primeros días hubo comunicación normal. Sin embargo, con el pasar de los días la comunicación se interrumpió. Desde entonces, el silencio es absoluto: ni llamadas de auxilio ni señales en rutas habituales de retorno.
Hace cuatro días notificaron la desaparición
Los parientes de los pescadores notificaron formalmente la desaparición a la Capitanía de Puerto de Manta y a la Zona Naval 4 de la Armada del Ecuador. Ante eso, la Armada activó el protocolo SAR (Búsqueda y Rescate Marítimo). También se dio aviso a las embarcaciones que andan por la zona para que ayuden en el rescate, en caso de ver a la deriva a los pescadores desaparecidos hace siete días.
La hipótesis de atraco está basada en testimonios de pescadores que reportaron avistamientos de piratas en la zona. Aunque esta versión no ha sido confirmada por inteligencia naval.
Temores de atraco: la sombra de la delincuencia marítima
La comunidad de San Mateo, con 5.000 habitantes vinculados directamente a la pesca, vive atemorizada por el temor a grupos armados que operan en altamar. Se sospecha que detrás de la desparición de hermanos López Villacreses estarían los piratas. Estos ladrones van detrás de equipos de rastreo, los motores y la pesca, algo que es un patrón recurrente en Manabí.
La parroquia que está enclavada en una bahía estratégica para rutas de narcotráfico, ha visto un repunte de incidentes. En agosto de 2025, una fibra similar fue despojada de su motor a 10 millas de Manta.
Contexto de inseguridad marítima: un año de sombras en Manabí
Manabí, con 18.599 pescadores artesanales registrados según el último censo del Ministerio de Acuacultura y Pesca enfrenta una ola de violencia en altamar impulsada por el narcotráfico. En 2025, la Armada ha documentado 12 atracos a embarcaciones artesanales en aguas ecuatorianas, un 40% más que en 2024, con robos de combustible y motores que dejan pérdidas en los pescadores.
La señal se perdió a 30 millas náuticas, y pese a búsquedas con buques como el “Orión” hasta enero de 2025, solo se hallaron restos como boyas y balsas salvavidas; la operación pasó a pasiva el 17 de enero sin localizar tripulantes ni embarcación completa. (27)