Preocupa en Portoviejo la estadística de llamadas de emergencia por robos que presenta la Policía Nacional: un pedido de ayuda cada nueve horas, en promedio.
La cifra refleja un aumento del 56 por ciento con respecto al año anterior, pero solamente recoge los casos en los que las personas afectadas por un hecho delictivo han solicitado ayuda a la Policía.
No son pocas las ocasiones en que las víctimas de la delincuencia deciden no reportar lo ocurrido. Es indiscutible, entonces, que existe un subregistro de denuncias.
Se debe tomar en cuenta que la capacidad operativa de la Policía ha disminuido a consecuencia de la crisis, a tal punto que las mismas autoridades han reconocido limitaciones por falta de vehículos habilitados, carencia de dinero para abastecer a las unidades de combustible e insuficiencia de uniformados.
«Las UPC son un aliado eficaz en la respuesta inmediata a las amenazas”.
La seguridad ciudadana tiene que mejorar y las Unidades de Policía Comunitaria son un aliado eficaz en la respuesta inmediata a las amenazas de la delincuencia. Pero para ello no solamente se necesitan más agentes, sino también vehículos operativos y espacios acondicionados para el trabajo policial.
La Policía debe trabajar de la mano con la sociedad civil para mejorar la seguridad. Pero del lado estatal falta más apoyo.
Editorial de El Diario publicado este lunes 24 de octubre del 2022 en nuestra edición impresa.