Los ataques contra medios de comunicación, agresiones a periodistas y el asesinato de comunicadores sociales no deben quedar en la impunidad.

El año 2022 cerró con un saldo negativo para la libertad de expresión.

Se contaron 356 agresiones contra periodistas, la cifra más alta desde el año 2018, según los registros de Fundamedios.

Entre esos hechos se cuentan los asesinatos de Mike Cabrera, Gerardo Delgado y César Vivanco.

Además, el femicidio de Johanna Guayguacundo y la desaparición de Fernando León.

También constan atentados y amenazas contra comunicadores, así como ataques y advertencias a medios de comunicación.

La frecuencia con la que se repiten casos de esta naturaleza deja notar que no se trata de eventos aislados.

Sino de eventos planificados, a veces por grupos de delincuencia organizada.

«Dejar que la impunidad sea la regla y no la excepción sería nefasto para la sociedad”.

Las autoridades deben investigar a profundidad estos casos y todos los que tienen que ver con ataques violentos contra la integridad y vida de las personas.

Dejar que la impunidad sea la regla y no la excepción sería nefasto para la sociedad.

Ya es tiempo, también, de que se active el comité de protección de periodistas y que tome todas las medidas que sean necesarias para garantizar el trabajo de los comunicadores.

Editorial de El Diario publicado este viernes 6 enero del 2023 en nuestra edición impresa.