Luis Jonathan Alaña Patiño, de 31 años, murió tras recibir varios tiros frente a un taller de motos en la parroquia Noboa, cantón 24 de Mayo, provincia de Manabí, en un ataque de sicarios que huyeron tras el hecho.
A las 09h00, Luis Alaña conversaba con varias personas frente a un taller de motos en una calle céntrica de la parroquia Noboa, cerca de una iglesia y negocios locales. Cuando desconocidos llegaron al lugar y dispararon repetidamente contra él, impactándolo en diversas partes del cuerpo. Los atacantes escaparon con rumbo desconocido, según testigos.
El crimen generó pánico entre comerciantes y transeúntes, quienes presenciaron el ataque en una zona conocida por su actividad comercial. Algunos ciudadanos intentaron auxiliar a Alaña, pero falleció en el lugar antes de que llegaran los rescatistas.
La Policía Nacional acudió al sitio tras la alerta y acordonó la zona para garantizar la seguridad. Agentes de la Dinased (Dirección Nacional de Delitos contra la Vida y Muertes Violentas) y Criminalística recolectaron evidencias, incluyendo casquillos de bala, para esclarecer el crimen. Personal de medicina legal se trasladó al lugar de los hechos, pero tuvieron que regresar sin el cuerpo, ya que sus familiares se opusieron al traslado de los restos mortales al centro forense de Manta.
Cómo el asesinato a tiros frente al taller se han dado más hechos
El cantón 24 de Mayo enfrenta una ola de violencia en 2025, con varios sicariatos similares al de Noboa. Según la Policía Nacional, Manabí registró 502 muertes violentas hasta el 3 de junio, muchas vinculadas al narcotráfico y disputas entre grupos delictivos. La parroquia Noboa, aunque rural, no escapa a esta tendencia, lo que preocupa a los habitantes.
La Dinased analiza las evidencias recolectadas, incluyendo los casquillos, y revisa cámaras de seguridad en el centro de Noboa para identificar a los sicarios. Los agentes entrevistan a testigos que presenciaron el ataque. La Fiscalía supervisa la investigación para determinar el móvil del crimen, que podría estar relacionado con actividades delictivas en la región.
El asesinato de Luis Alaña Patiño conmocionó a los moradores de Noboa, quienes lamentaron la pérdida de seguridad en una zona tradicionalmente tranquila. La sangre en el pavimento y el cuerpo junto al taller generaron consternación entre los transeúntes. Comerciantes locales pidieron más patrullajes policiales para prevenir nuevos ataques.
Operativos de seguridad
La Policía Nacional intensificó los controles en 24 de Mayo tras el sicariato, desplegando unidades en Noboa y otras parroquias. Los agentes buscan a los responsables mediante operativos en carreteras y sectores aledaños. Las Fuerzas Armadas, que apoyan en Manabí, reforzarán la vigilancia para desarticular grupos delictivos, según un comunicado oficial.
La Policía Nacional exhortó a los ciudadanos a proporcionar información sobre el caso a través de la línea 1800-DELITO. Las autoridades destacaron que las denuncias anónimas son clave para capturar a los sicarios. La Municipalidad de 24 de Mayo evalúa instalar más cámaras en Noboa para mejorar la seguridad en el centro comercial. (22)