Un sismo de magnitud 4,8 en la escala de Richter se dio frente a las costas de Montecristi, provincia de Manabí, la noche del viernes 13 de junio, según el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional. El epicentro, ubicado a 35,41 kilómetros de la costa y a 18 kilómetros de profundidad, generó alerta en Manta, Jaramijó, Portoviejo y Santa Ana. La ubicación de Ecuador en el Cinturón de Fuego del Pacífico explica su alta actividad sísmica.
El reciente sismo en Montecristi, reportado por el Instituto Geofísico, no generó daños materiales ni víctimas, pero su duración alarmó a los residentes. Usuarios en redes sociales describieron un movimiento perceptible que despertó preocupación en los hogares. La provincia de Manabí, históricamente afectada por sismos como el de magnitud 7.8 en el año 2016, enfrenta riesgos constantes debido a su posición en el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde la placa de Nazca subduce bajo la placa Sudamericana.
Expertos de la Universidad de Piura y el Instituto Geofísico del Perú, que estudian regiones sísmicas similares, recomiendan elaborar un plan de emergencia familiar. Identifique zonas seguras en el hogar, como áreas bajo muebles resistentes o lejos de ventanas. Prepare una mochila de emergencia con agua, alimentos no perecibles, linterna, botiquín y documentos. Realice simulacros periódicos para garantizar que todos sepan cómo actuar.
El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias de Ecuador indica que, durante un sismo, las personas deben mantener la calma y evitar correr. Si está en interiores, colóquese bajo una mesa resistente o protéjase junto a una pared estructural. Evite ascensores y aléjese de objetos que puedan caer, como lámparas o estanterías. En exteriores, diríjase a un área abierta, lejos de edificios, árboles o cables eléctricos.
Consejos ante sismos en espacios específicos
En un vehículo, deténgase en un lugar seguro y permanezca dentro hasta que cese el movimiento. Si está en un lugar público, como un centro comercial, no obstruya las salidas y siga las indicaciones del personal. La Universidad Politécnica Salesiana, tras estudiar el sismo de 2016, destaca la importancia de conocer las rutas de evacuación en edificios públicos y residenciales.
Una vez que el movimiento termina, revise su entorno por daños estructurales, fugas de gas o incendios. El Instituto Geofísico sugiere no usar electricidad hasta confirmar que no hay cables expuestos. Evite regresar a edificaciones inestables y prepárese para posibles réplicas. En Manabí, el sismo de 2016 dejó 670 fallecidos, lo que resalta la necesidad de actuar con rapidez y precaución.
Si hay heridos, aplique primeros auxilios básicos y contacte a los servicios de emergencia. Use el teléfono solo para reportes urgentes, ya que las líneas pueden saturarse. La Secretaría de Gestión de Riesgos recomienda monitorear fuentes oficiales, como el Instituto Geofísico, para actualizaciones sobre réplicas o alertas.
Importancia del monitoreo continuo
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional monitorea constantemente la actividad sísmica en Ecuador. Tras el sismo del 13 de junio, desplegó acciones para registrar réplicas y evaluar impactos. Los expertos instan a la población a reportar sismos sentidos en plataformas oficiales para mejorar los datos sísmicos.
La Universidad Politécnica Salesiana enfatiza la construcción sismo-resistente, especialmente en Manabí, donde las edificaciones de madera han demostrado mayor elasticidad frente a temblores. Refuerce su vivienda con asesoría profesional y participe en capacitaciones comunitarias sobre gestión de riesgos.
La alta actividad sísmica de Ecuador, especialmente en Manabí, exige preparación constante. Seguir las recomendaciones de instituciones como el Instituto Geofísico y universidades garantiza una respuesta efectiva durante y después de un sismo, reduciendo riesgos y protegiendo vidas.
