22 años de prisión por violar a una niña de 9 años
Por el intento de suicidio de una niña, las autoridades descubrieron que sufrió una violación y su agresor fue sentenciado a 22 años de cárcel.
La Fiscalía informó que la violación ocurrió en el 2016, cuando la víctima tenía 9 años, en la vivienda donde habitaba el agresor, que es primo del papá de la niña.
Ella solía acompañar a su madre que trabajaba en esta casa.
En el informe de la Fiscalía se detalla que el hombre habría agredido sexualmente a la niña en la segunda planta de la casa cuando ella fue a buscar pañales para un bebé.
La agresión ocurrió en varias ocasiones y el hombre amenazó a la niña para que no diga nada. Por ese motivo la víctima se negó a volver a esa casa con su madre y nunca le comentó nada.
Fue en el 2022, cuando la víctima tenía 15 años, que intentó suicidarse dentro del colegio donde estudiaba.
Contó el caso a la psicóloga
La psicóloga del colegio atendió el caso y le contó lo que había ocurrido.
Por ese motivo los padres de la adolescente presentaron una denuncia en la Fiscalía. La entidad ordenó la detención de Claudio R. B., acusado de violación.
Para comprobar su teoría la Fiscalía presentó los resultados de las pericias practicadas a la víctima a través de un examen psicológico y de entorno social.
En los informes presentados se señala que las afectaciones psicológicas, es decir el intento de suicidio, son producto de la agresión sexual.
Además, los análisis coinciden plenamente con el relato de la víctima, quien describió el hecho en un testimonio anticipado que también fue presentado en la audiencia.
Con estas pruebas, un Tribunal de Garantías Penales dictó sentencia condenatoria de 22 años en contra de Claudio R. B., quien fue declarado culpable del delito de violación.
A él se le impuso la máxima pena, ya que el delito de violación es sancionado con diecinueve a veintidós años de cárcel.
El hombre permanece en la cárcel El Rodeo de Portoviejo desde el año pasado cuando lo detuvieron.
La Fiscalía informó que el testimonio anticipado es un recurso legal usado mayormente en casos de abuso sexual.
Esto ocurre para evitar la revictimización de la víctima, es decir, evitar que la persona tenga que repetir una y otra vez lo ocurrido. El testimonio normalmente es usado como prueba en el juicio.
