Claudia Sheinbaum, presidenta de México, anunció este jueves que Donald Trump no impusiera nuevas tarifas a México en su Día de la Liberación. Resalta que esto es resultado de una relación sólida y respetuosa con Estados Unidos, que beneficia al país.
La mandataria ve con optimismo la decisión de Donald Trump. Durante su conferencia de prensa, Sheinbaum destacó que este resultado es producto de la buena relación que se ha construido con Estados Unidos. En sus palabras, esta relación se basa en el respeto mutuo hacia los mexicanos y la soberanía de México. La presidenta bromeó diciendo que algunos no lo reconocen, pero asegura que la fuerza del gobierno mexicano y el respaldo del pueblo son claves en este resultado.
A pesar de la buena noticia, México aún enfrentará aranceles en algunos sectores, como los automóviles, el acero y el aluminio. Sheinbaum explica que estas tarifas, aunque no afectan directamente a México por el TMEC, aún están siendo negociadas. En particular, el sector automotriz sigue bajo conversación, con avances en la reducción de las tarifas en función de los componentes fabricados en Estados Unidos.
Canadá responde a Trump imponiendo aranceles del 25% a algunos vehículos fabricados en EE.UU.
México trabaja en mejorar los acuerdos comerciales
Por otro lado, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, dijo que las conversaciones seguirán, especialmente con respecto a las exportaciones de acero y aluminio, que representan solo un pequeño porcentaje del comercio entre los países. A pesar de estos desafíos, destacó que México ha protegido sectores clave, como la industria agroalimentaria, los dispositivos médicos y las manufacturas electrónicas, que se han librado de los nuevos aranceles.
El optimismo también se reflejó en el peso mexicano, que se apreció frente al dólar en los últimos días. Ebrard confirmó que el equipo mexicano trabaja en mejorar las condiciones de los acuerdos, con la esperanza de alcanzar mejores resultados en los próximos días. Esta situación muestra cómo las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos siguen siendo un factor crucial para el futuro económico del país.