Con la serenidad que la caracteriza y la misma energía que la ha mantenido sobre los escenarios durante más de tres décadas, Lila Flores, reconocida cantante ecuatoriana e integrante de Las Damas de Oro, respondió con firmeza a quienes la han cuestionado por su apariencia física.
“Las cosas que me he hecho en mi rostro las realiza una cirujana plástica, no una esteticista. Es una profesional muy preparada”, aseguró la artista en una entrevista con EXTRA, luego de que en redes sociales circularan rumores sobre supuestos procedimientos invasivos.
La intérprete explicó que el tratamiento que se aplicó se llama Radiesse, una sustancia que estimula la producción natural de colágeno en la piel. “Me lo puse hace tres meses y recién estoy viendo los cambios”, comentó, dejando claro que se trata de un proceso médico controlado y nada extremo.
“No me he transformado, sigo siendo yo” -Lila Flores
Lejos de los excesos que suelen asociarse a las cirugías estéticas, Lila Flores aclaró que su objetivo nunca fue alterar sus rasgos, sino mantener una imagen fresca y natural, acorde a su edad.
“Me ha ayudado a darle a mis labios frescura, pero se ven normales, no exagerados. También me ayudó con las líneas de expresión de la frente. Mi cara siempre ha sido redondeada, y si subo de peso eso se nota. Lo que se ve distinto es eso, no un relleno”, detalló.
El tratamiento, explicó, es común entre celebridades internacionales y busca realzar la belleza natural sin modificar la fisonomía. “Es una técnica muy usada en Hollywood y lo importante es hacerlo con un especialista serio”, enfatizó.
Críticas en redes y amor propio
Las redes sociales no tardaron en generar comentarios sobre su aspecto, algunos de ellos negativos. Pero la artista asegura que no se deja afectar. “Las personas que se ponen a criticar están podridas por dentro, no son felices. Me dan pena. A mí no me afectan los comentarios, porque algo que no me gusta lo bloqueo, lo borro y sigo con mi vida”, dijo sin titubeos.
Flores, quien recientemente sufrió una caída en el escenario durante un concierto, afirmó que ha aprendido a priorizar su bienestar físico y emocional por encima de la opinión pública. “Estoy contenta de que a mi edad pueda tener estas opciones para lucir un rostro fresco, que es la idea”, afirmó.
A sus 51 años, Lila Flores defiende la idea de que el autocuidado no es vanidad, sino parte del amor propio. Con su sinceridad y determinación, la cantante recordó que la verdadera belleza también está en la actitud.