El Hospital Verdi Cevallos Balda en Portoviejo atiende hasta 16 pacientes diarios con trastorno del espectro autista (TEA). Expertos explican causas, diagnóstico y tratamiento.
En Ecuador, los diagnósticos de trastorno del espectro autista (TEA) han aumentado en los últimos años. En Portoviejo, Manabí, el Hospital Verdi Cevallos Balda atiende hasta 16 pacientes diarios con esta condición. Según Héctor Quintero, genetista de esta institución, el 80% de los casos son de origen hereditario. Este incremento responde a mejores métodos de diagnóstico y mayor concienciación sobre el TEA.
Aumento de diagnósticos de autismo en Manabí
El trastorno del espectro autista ha sido objeto de estudio por su crecimiento en las estadísticas de salud. En el Hospital Verdi Cevallos Balda, se han registrado hasta 16 pacientes diarios en consulta externa. Según el genetista Héctor Quintero, los casos se dividen en:
- Autismo primario: multifactorial, con influencia de factores genéticos y ambientales (95% de los casos).
- Autismo secundario o sindrómico: asociado a otros síndromes como el síndrome de Down (5% de los casos).
“La mayoría de los pacientes diagnosticados son de género masculino”, explica Quintero. Esto podría deberse a factores genéticos y al fenómeno conocido como ‘masking’ en niñas, donde se termina enmascarando el trastorno y los síntomas se ocultan haciendo que el diagnóstico sea más difícil.
Factores genéticos y primeros signos de alerta
El TEA no tiene una cura, pero su detección temprana es clave para mejorar la calidad de vida. El 80% de los casos tienen origen hereditario, según el doctor Quintero. “El autismo tiene un alto índice de herencia, lo que significa que en muchas familias se pueden encontrar antecedentes de esta condición”, añade.
Existen varios signos de alerta en los primeros meses de vida, entre ellos:
- No mantener contacto visual.
- No responder al nombre.
- Hipersensibilidad a ruidos.
- Realizar movimientos repetitivos.
- No participar en juegos interactivos.
- No compartir intereses con otras personas.
Si estos signos aparecen, los especialistas recomiendan buscar evaluaciones profesionales para un diagnóstico temprano.
“No es lo mismo evaluar a un niño de dos años que a un adolescente o un adulto», aclara Quintero. En algunos casos, los síntomas pueden ser más evidentes desde una edad temprana, mientras que en otros pueden pasar desapercibidos hasta la adultez.
Experiencia de las familias
Nancy Zambrano, es una mamá azul, tiene tres hijos con autismo y relata los retos que ha enfrentado. “Fue un proceso difícil, porque no entendíamos qué estaba pasando”, cuenta. “Al principio, me di cuenta de que su comportamiento era diferente al de su hermano mayor, pero no fue hasta el diagnóstico que comprendí realmente lo que significaba el autismo”.
Descubrió que su esposo también tenía TEA y narcolepsia. Con el tiempo, aprendió a identificar las primeras señales en sus hijos y buscó apoyo terapéutico. “El desafío más grande es contenerlos cuando tienen una crisis. Hay días en los que todos tienen crisis al mismo tiempo, y es difícil manejarlo”, dice Zambrano.
A pesar de las dificultades, destaca la inteligencia y afecto de los niños con esta condición. “Mis hijos son brillantes y amorosos”, comenta. “Me duele cuando la sociedad los trata de forma diferente. No deberían ser discriminados por algo que no eligieron. Son personas con mucho valor”.
Importancia de las terapias especializadas para el autismo
El terapista ocupacional Ernesto Saltos, del Hospital Verdi Cevallos Balda, enfatiza la relevancia de las terapias tempranas. “Cuando un niño es diagnosticado con TEA, es fundamental empezar con las terapias lo antes posible. Cuanto antes se trabaje en su desarrollo, mejores serán los resultados a largo plazo”, señala.
En la sala multisensorial del hospital, trabajan con niños con TEA para reforzar su seguridad y confianza. “Buscamos que los niños puedan desenvolverse en un entorno seguro”, explica Saltos. “Si logramos que se sientan seguros aquí, poco a poco podrán adaptarse a otros entornos, como la escuela o espacios públicos”.
Las terapias incluyen:
- Juegos interactivos.
- Ejercicios para mejorar la motricidad.
- Actividades que favorecen la adaptación a distintos entornos.
Saltos se refiere a los avances logrados en la integración escolar. “Hemos visto muchos casos exitosos de niños con TEA que logran integrarse en escuelas regulares. Con el apoyo adecuado, pueden desarrollar sus habilidades y alcanzar su máximo potencial”.
Investigaciones sobre el origen del TEA
A pesar de los avances en la comprensión del autismo, aún no se conoce con certeza su origen. Estudios indican que hay múltiples factores de riesgo, como:
- Factores genéticos.
- Exposición a sustancias tóxicas en el embarazo.
- Problemas en el desarrollo neurológico prenatal.
“Hasta la actualidad, no hay una respuesta definitiva sobre qué causa el autismo”, indica Quintero. “Lo que sabemos es que existen diversos factores que pueden influir en su desarrollo. La genética juega un papel importante, pero también hay factores ambientales que podrían estar involucrados”.
Cada 2 de abril se conmemora el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, una fecha que busca educar y generar conciencia sobre la importancia de la detección temprana y el respeto a la neurodiversidad.
“La detección temprana es clave”, concluye Saltos. “Si los padres notan señales de alerta en sus hijos, deben acudir a un especialista cuanto antes. Un diagnóstico a tiempo puede marcar la diferencia en su desarrollo”.