Seguir una dieta saludable puede transformar tu salud, incluso si no pierdes peso, según un estudio destacado por Infosalus. Isabel García, nutricionista de la Sociedad Española de Nutrición, explica cómo una alimentación equilibrada reduce riesgos cardiovasculares y mejora el bienestar en España, beneficiando a millones.

En un mundo obsesionado con la báscula, un estudio publicado por Infosalus trae una noticia liberadora: una dieta saludable mejora la salud sin necesidad de perder peso. Isabel García, nutricionista de la Sociedad Española de Nutrición, destaca que comer bien reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, mejora el estado mental y optimiza el metabolismo. “No se trata de kilos, sino de nutrir el cuerpo”, afirma.

Beneficios más allá de la báscula

La dieta saludable, rica en frutas, verduras, cereales integrales y grasas saludables, tiene impactos profundos. Según el estudio, mejora la presión arterial, reduce el colesterol y estabiliza los niveles de glucosa, incluso en personas que mantienen su peso. Un análisis de 2024 de la Universidad de Harvard respalda que una alimentación equilibrada disminuye un 20% el riesgo de infartos.

García explica que alimentos como el aceite de oliva, las legumbres y los frutos secos, típicos de la dieta mediterránea, son clave. “No necesitas eliminar nada, solo priorizar comida real sobre ultraprocesados”, dice.

Salud mental y longevidad

El impacto no es solo físico. El estudio señala que una dieta saludable reduce los síntomas de ansiedad y depresión al mejorar la microbiota intestinal. “Lo que comes afecta tu cerebro”, asegura García. Un informe de 2023 de la Organización Mundial de la Salud confirma que dietas ricas en fibra y omega-3 mejoran el ánimo.

Además, una alimentación equilibrada alarga la vida. El estudio cita que quienes siguen dietas saludables tienen un 15% menos de riesgo de mortalidad prematura, según datos de la Universidad de Barcelona.

Cómo adoptar una dieta saludable

García propone pasos simples: llenar la mitad del plato con verduras, elegir cereales integrales y limitar los ultraprocesados. “No es una dieta estricta, es un estilo de vida”, dice. Recomienda usar recursos como la Guía de Alimentación Saludable de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria.

La experta también sugiere consultar a un nutricionista para personalizar la dieta. “Cada persona es única, y un profesional ayuda a encontrar el equilibrio”, añade.

Un cambio para toda la vida

La dieta saludable no promete perder kilos rápido, pero sí una vida más plena. “La salud no se mide en la báscula, sino en cómo te sientes”, concluye García. Este mensaje inspira a millones a comer mejor sin obsesionarse con el peso, demostrando que una buena alimentación es la clave para vivir más y mejor.