Chris Kyle, conocido como el francotirador más letal de la historia militar de Estados Unidos, marcó un legado en la guerra de Irak con 160 muertes confirmadas. Nacido el 8 de abril de 1974 en Odessa, Texas. Kyle fue un Navy SEAL cuya vida, narrada en su autobiografía American Sniper y adaptada al cine por Clint Eastwood, terminó trágicamente el 2 de febrero de 2013.

Ese día murió, asesinado, en un campo de tiro en Texas. Su historia combina heroísmo, sacrificio y un compromiso con los veteranos. Kyle creció en un rancho texano, donde desarrolló su habilidad con las armas desde los ocho años. A esa edad su padre le regaló un rifle Springfield. Tras un breve paso como cowboy de rodeos, una lesión en el brazo lo llevó a enlistarse en la Marina en 1999.

La cabeza de Chris Kyle tenía un precio en Irak

Completó el entrenamiento de los SEAL y lo desplegaron en cuatro misiones en Irak (2003-2008). Allí su precisión como francotirador le valió el apodo “El Demonio de Ramadi” por parte de los insurgentes, quienes ofrecieron 80 mil dólares por su cabeza. El Pentágono le acreditó 160 bajas, aunque Kyle afirmó haber eliminado hasta 255 enemigos. Recibió dos Estrellas de Plata y cinco de Bronce por su valentía.

Tras retirarse en 2009, Kyle enfrentó dificultades para adaptarse a la vida civil, lidiando con el estrés postraumático de la guerra. Publicó American Sniper en 2012, un libro de memorias que detallaba sus experiencias en combate y su vida familiar con su esposa Taya y sus dos hijos, Colton y McKenna. El libro se convirtió en un éxito de ventas y lo adaptaron al cine en 2014, con Bradley Cooper en el papel principal. La película, nominada a seis premios Óscar, ganó el galardón a Mejor Edición de Sonido.

La viuda de Kyle ayuda a veteranos y sus familiares

Chris Kyle fundó Craft International, una empresa de seguridad privada, y colaboró con la Fundación FITCO para apoyar a veteranos con trastorno de estrés postraumático (TEPT). El 2 de febrero de 2013, en un campo de tiro en Rough Creek Lodge, Texas, Chris Kyle y su amigo Chad Littlefield fueron asesinados por Eddie Ray Routh. Se trataba de un exmarine con TEPT al que intentaban ayudar.

Routh, de 25 años, fue condenado a cadena perpetua sin libertad condicional en 2015 tras un juicio en Stephenville, Texas. Según informes, Routh disparó tras sentirse ignorado durante el trayecto al campo de tiro. El legado de Kyle perdura a través de la Chris Kyle Frog Foundation, creada por su viuda Taya para ayudar a veteranos y sus familias.

En Texas, el 2 de febrero se conmemora como el “Día de Chris Kyle” en su honor, y una estatua conmemorativa fue erigida en su memoria. Su historia, aunque controversial por las muertes que causó, destaca por su dedicación a proteger a sus compañeros y apoyar a los veteranos tras la guerra. Kyle sigue siendo una figura de admiración en Texas, donde es recordado como un héroe militar.