Más de $518 millones en pérdidas por la pandemia de covid-19

Bermúdez es propietario de un “cincuentazo” (un local en el que se venden objetos que en su mayoría cuestan 50 centavos) y su negocio marchaba bien, pues con las ventas podía cubrir las cuotas de los créditos en los bancos y pagar el auto nuevo, pero llegó la pandemia y la situación se volvió compleja.

Primero, dice, tuvo que cerrar su local por tres meses, por lo que en ese tiempo no tuvo ingresos y las deudas empezaron a acumularse. Cuando abrió su negocio, no lo podía hacer todos los días, eran pocas las personas que llegaban a comprar y apenas recaudaba para pagar el arriendo del local.

Tres meses antes de que se terminara el 2020, Bermúdez decidió trasladar su negocio a su casa para no pagar arriendo, pero las ventas son mínimas y no alcanzan para cancelar los cerca de 1.500 dólares mensuales de los créditos y el auto. Ahora, dice que está al borde de perder su carro y que a diario recibe llamadas de presión para cancelar los créditos.

Su caso es uno de los tantos que dejó la pandemia del COVID-19 en el 2020.

 

 QUIEBRA. Ángel Zambrano, presidente de la Asociación de Pequeños Comerciantes de Portoviejo, calcula que al menos el 30% de los vendedores del comercio autónomo de la calle Alajuela ha cerrado sus negocios por la crisis económica, que los ha afectado más que el terremoto del 2016.

“Hay días que no se vende nada”, comenta el dirigente, mientras muestra los locales cerrados y menciona que varios comerciantes están optando por vender sus módulos metálicos.

Zambrano dice que el cierre de los negocios se da por la falta de ventas y por el acoso que sienten de parte de la banca, pues les llegan a cobrar hasta sus puestos sin importar si han vendido o no. 

Hasta antes de la pandemia, el comercio en general estaba considerado como el segundo sector que más movía la economía en Manabí. Según las proyecciones del Banco Central del Ecuador (BCE), en el 2019 generó más de 700 millones de dólares.

 

 PÉRDIDAS. De acuerdo a la proyección provisional del Valor Agregado Bruto (VAB), en el 2019 Manabí tuvo un ingreso que alcanzó los 5.829’023.300 dólares, mientras que en el 2020 los ingresos que habría generado la provincia alcanzarían los 5.310’240.190 dólares. Esto, de acuerdo al cálculo del decrecimiento interanual del 8,9% que estimó el BCE. 

Con ese balance, la pérdida económica que habría tenido Manabí en el 2020  alcanzaría los 518’783.110 dólares, en comparación con el VAB del 2019.

El VAB es una variable económica que determina cuánto aporta cada una de las provincias y cantones al Producto Interno Bruto (PIB).

En Manabí, los cantones que más aportan a la economía son Portoviejo, Manta, Montecristi, Chone, Jaramijó y El Carmen, donde se encuentran las mayores empresas de manufactura, pesquera, agrícola, ganadera, de transporte y de comercio.

En Manta, por ejemplo, el VAB del 2019 fue de $1.712 millones. Con el decrecimiento del 8,9% que hubo en el 2020, se calcula que los ingresos que tuvo fueron de 1.559 millones de dólares, es decir, unos  $153 millones menos. 

En Portoviejo, la proyección del VAB del 2019 fue de más de 1.469 millones de dólares, mientras que en el 2020 se calcula que fue de 1.338 millones, dejando una pérdida de $131 millones.

El sector de la construcción es el que más recursos mueve en Manabí, pues en el 2019 generó 843,79 millones de dólares; seguido del comercio al por mayor y menor que movió $700,34 millones; el procesamiento y conservación de pescado y otros productos acuáticos generó $548,93 millones; transporte y almacenamiento $533,06 millones; y, enseñanza con $523,65 millones, según el BCE.