La lluvia se llevó un pedazo de calle



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La alegría de los vecinos de la calle Jorge Luis Borges de estrenar calle asfaltada les duró poco.
La noche del sábado el aguacero provocó el hundimiento de unos 15 metros de calle, y al siguiente día el colapso de la arteria localizada en el barrio Los Laureles, de la cooperativa Asistencia Municipal, sector 1.

La inauguración de la obra fue el 20 de diciembre. Los moradores aseguran que no se contempló el alcantarillado pluvial, lo que causó la emergencia.
En el sitio hay dos casas en riesgo. Una de ellas es la de Marianita Bravo.
“Toda el agua lluvia se acumuló y fue socavando la tierra debajo del asfalto. El sábado estaba partido, el domingo se empezó a ir la calle y el lunes cayó otro pedazo”, expuso la mujer.

Ella tiene temor de que la fuerza del agua dañe el cerramiento de la casa vecina y luego la suya.
Hasta el sitio desde el domingo ha arribado maquinaria municipal y volquetas que depositan piedras donde hasta la semana pasado transitaban vehículos.

El cabildo informó que en el sitio se trabaja en la construcción de un muro de escolleras para recuperar la estabilidad de la calle.
“El asfaltado de la vía está afectado producto del aumento del caudal del estero Infiernillo”, se comunicó.

>En otros sectores. Esta no es la única emergencia que se registró en la capital tsáchila producto de las intensas lluvias de las últimas horas.
En la calle Zumba los vecinos vivieron la segunda inundación en lo que va de la temporada invernal.
Allí una alcantarilla de cajón se llenó de basura, lo que provocó el aumento del caudal del río Pove.
Ayer en horas de la mañana la maquinaria del Municipio ejecutó tareas de remoción de material.
Ana Ibarra, vecina, cuenta que el aguacero empezó ayer a las 17h00, y una hora después empezó la inundación que dejó al menos una docena de viviendas afectadas.

“Lo bueno fue que no demoró mucho, solo una medida hora”, comentó.
En el sector 1 de la cooperativa Santa Martha, varias viviendas se inundaron de aguas servidas.
Mientras que en la cooperativa Paquisha el aguacero provocó que un árbol cayera y se enredara con cables eléctricos, dejando a dos familias en riesgo.
En la zona rural también se reportaron novedades por las lluvias. El puente badén del sector La Felipe, en la parroquia Alluriquín, fue sobrepasado por las aguas del río Lelia.

Pese al peligro, hubo conductores que se atrevieron a cruzar el viaducto con sus vehículos.