Antonio Espaillat, empresario dominicano y dueño de la discoteca Jet Set salió en libertad tras pagar una fianza de 850 mil dólares. El techo de la discoteca colapsó el 8 de abril del 2025 causando 236 muertes y dejando más de 180 heridos. Espaillat abandonó el Palacio de Justicia de Santo Domingo sin declarar a los medios. Esto luego de que un tribunal le otorgó la medida de libertad que también favoreció a su hermana Maribel.
Los hermanos Espaillat son acusados de homicidio involuntario por el Ministerio Público y había solicitado 18 meses de prisión preventiva para Espaillat y arresto domiciliario para Maribel. La jueza Fátima Veloz, impuso a los hermanos impedimento de salida del país y presentación periódica ante la Fiscalía del Distrito Nacional. La tragedia ocurrió durante una presentación del merenguero Rubby Pérez, quien también falleció.
Dueño de la discoteca Jet Set se defenderá en libertad
El colapso del techo de la discoteca Jet Set, ubicada en el corazón de Santo Domingo, se produjo mientras cientos de personas disfrutaban del evento musical. Las investigaciones preliminares apuntan a fallos estructurales en el establecimiento, lo que derivó en la acusación contra los hermanos Espaillat por presunta negligencia. El Ministerio Público sostiene que el dueño de la discoteca no garantizó las condiciones de seguridad necesarias.
Ángel Lockward, abogado de varios familiares de las víctimas, expresó que la decisión de libertad ha generado “airado rechazo” en la sociedad dominicana. “El país está consternado. Esperábamos una medida más severa que refleja la magnitud de la tragedia”, afirmó Lockward. Él adelantó que las familias continuarán exigiendo justicia. Organizaciones sociales y colectivos de víctimas han convocado manifestaciones para los próximos días.
Autoridades buscan prevenir tragedias similares
El caso ha reavivado el debate sobre la regulación de locales nocturnos en República Dominicana. Expertos en seguridad estructural han señalado que muchos establecimientos operan sin cumplir normativas, lo que representa un riesgo para los asistentes. Autoridades locales han anunciado inspecciones a discotecas y centros de entretenimiento en todo el país, con el objetivo de prevenir tragedias similares.
La discoteca Jet Set, un ícono de la vida nocturna en Santo Domingo, era conocida por albergar eventos con artistas de renombre. Sin embargo, tras el colapso, el local permanece clausurado y bajo investigación. Los heridos, muchos de los cuales aún reciben tratamiento médico, y las familias de las víctimas han recibido apoyo psicológico. También han recibido ayuda económica de instituciones gubernamentales.
El Ministerio Público prepara la apelación contra la fianza otorgada a los hermanos Espaillat, mientras la sociedad dominicana espera que el caso siente un precedente en la lucha contra la impunidad en tragedias evitables. Las próximas audiencias serán clave para determinar si los acusados enfrentarán medidas más estrictas o si continuarán en libertad condicional durante el proceso judicial. El dueño de la discoteca se defenderá en libertad.
