El expresidente Jair Bolsonaro negó este lunes ante la Primera Sala del Supremo Tribunal Federal haber orquestado un plan golpista tras perder las elecciones presidenciales de octubre de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva. El exmandatario aseguró que sus críticas al sistema electoral fueron parte de una «retórica personal» y no una estrategia para alterar el orden democrático.
Bolsonaro niega intenciones golpistas ante el Supremo
Durante su declaración en audiencia, Bolsonaro afirmó que su discurso sobre las urnas electrónicas siempre fue público y sostenido a lo largo de sus tres décadas como legislador. Reiteró que su intención era «lograr mayor transparencia electoral» y que no existen pruebas de fraude en el sistema brasileño. “Mi retórica siempre fue parecida”, declaró; además, dijo que “la desconfianza es privativa mía”.
El líder de la ultraderecha brasileña reconoció que no puede demostrar técnicamente que el sistema de votación haya favorecido a algún candidato. Sin embargo, sostuvo que sus cuestionamientos buscaban “auxiliar al tribunal electoral”. También destacó que durante su mandato (2019–2022) no actuó en contra de la Constitución.
Antecedentes del caso y relación con Alexandre de Moraes
Bolsonaro enfrenta un proceso en el Supremo Tribunal Federal (STF) por su presunto papel como mentor de una trama para impedir la investidura de Lula da Silva. El juez Alexandre de Moraes, quien presidía la justicia electoral en 2022, lidera el caso. Durante su gestión como presidente, Bolsonaro atacó públicamente a De Moraes en múltiples ocasiones, incluyendo insultos durante actos oficiales.
El expresidente repasó su gestión gubernamental ante los jueces y aseguró que “ni una sola vez” violó principios constitucionales. “Insultaba, decía palabrotas, pero hice lo que tenía que ser hecho”, sostuvo, en referencia a su comportamiento durante y después de la campaña electoral.
Campaña por el voto impreso y desconfianza en el sistema electoral
Desde su etapa como concejal y luego como diputado, Bolsonaro promovió el uso del voto impreso como alternativa al sistema de urnas electrónicas, que considera vulnerable. Sin embargo, en su declaración ante el STF, admitió no tener pruebas que sustenten tales afirmaciones.
El proceso que lo vincula con una supuesta conspiración busca determinar si hubo intenciones deliberadas de impedir la toma de posesión de Lula tras su victoria. La audiencia forma parte de una serie de diligencias judiciales en las que el STF analiza los hechos ocurridos en el período postelectoral de 2022.