El Ministerio de Salud Pública confirmó el primer caso de fiebre amarilla en Ecuador este jueves, 24 de abril de 2025, en un hombre de 26 años.
De acuerdo a la entidad, el paciente, oriundo de Loja, presentó síntomas tras estar en la localidad amazónica de Zamora Chinchipe. Las investigaciones clínicas y epidemiológicas confirmaron el diagnóstico ayer.
El caso es considerado aislado, sin evidencia de un brote, según el boletín oficial. Cabe destacar que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) había alertado previamente sobre un aumento de casos en la región de las Américas en 2025, lo que encendió las alarmas en el país.
El paciente fue atendido en un hospital local y se encuentra bajo vigilancia médica. Las autoridades sanitarias han iniciado acciones de control vectorial en la zona para evitar la propagación del virus, que es endémico en áreas selváticas de Ecuador.
Conoce qué es la fiebre amarilla tras primer diagnóstico en Ecuador
La fiebre amarilla es una enfermedad viral hemorrágica aguda causada por un arbovirus del género Flavivirus. Se transmite a humanos mediante la picadura de mosquitos infectados, principalmente Aedes aegypti y Haemagogus, que habitan en áreas selváticas y urbanas.
El período de incubación es de 3 a 6 días, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En áreas urbanas, el riesgo aumenta si personas infectadas introducen el virus en zonas con alta densidad de mosquitos y poca inmunidad.
Síntomas y recomendaciones de vacunación
Los síntomas iniciales incluyen fiebre, dolor muscular, dolor de cabeza, pérdida de apetito, náuseas y vómitos, que suelen desaparecer en 3 a 4 días. Sin embargo, un pequeño porcentaje de pacientes entra en una fase tóxica con ictericia, hemorragias y fallo multiorgánico, que puede ser mortal.
La OMS estima que hasta el 50% de los casos graves pueden fallecer sin tratamiento adecuado.
La vacunación es la medida preventiva más efectiva. Se recomienda para personas mayores de 9 meses que vivan o viajen a zonas de riesgo o donde proliferan los mosquitos. Una sola dosis proporciona protección de por vida.
Además de la vacunación, se aconseja usar repelente, ropa protectora y mosquiteros para evitar picaduras. El Ministerio de Salud intensificará campañas de vacunación y control de mosquitos en áreas vulnerables tras este caso.
Brotes de fiebre amarilla
La fiebre amarilla ha causado brotes significativos, como el de 2016 en Angola, con 962 casos confirmados, o el de 2017-2018 en Brasil, con 1,376 casos.
El control de mosquitos, mediante fumigación y eliminación de criaderos, también es clave para reducir la transmisión.