En la comuna ancestral Llano Grande, de la parroquia Calderón, ubicada al norte de Quito, un rayo impactó mortalmente. La tragedia ocurrió este sábado 12 de abril en el parque Casa Tuya, donde dos hombres buscaban resguardo de la lluvia. Bajo unos juegos infantiles, el fenómeno natural los alcanzó. Un hombre perdió la vida en el acto. Su compañero, gravemente herido, recibió atención médica inmediata.
El medio Cero Latitud reportó el suceso, destacando la rápida respuesta de emergencias. A las 15h15, el ECU 911 coordinó acciones con el Ministerio de Salud. Asimismo, la Policía Nacional intervino para atender la crisis.
Las tormentas eléctricas en Ecuador se han convertido en un peligro cada vez más frecuente, con un aumento alarmante de incidentes relacionados con rayos. Según el Ministerio de Salud Pública, en los últimos tres años los casos de personas impactadas por rayos se han duplicado, pasando de 5 atenciones en 2021 a 10 en 2024. Este 2025, la tragedia ha golpeado nuevamente, con al menos tres víctimas mortales reportadas en lo que va del año.
El cambio climático y el calentamiento global están intensificando las lluvias y las tormentas eléctricas, especialmente en Orellana y Quito, la ciudad con mayor incidencia de impactos a personas.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) recomienda seguir el pronóstico del tiempo y adoptar medidas preventivas. La regla «30-30» es fundamental: si el trueno llega en menos de 30 segundos tras un relámpago, busca refugio en un edificio sólido.
Recomendaciones frente a los rayos
Los expertos insisten en evitar espacios abiertos durante las tormentas eléctricas. La National Geographic subraya que el aire conduce la electricidad de un rayo. Además, advierte que permanecer al exterior durante una tormenta representa un riesgo mortal. Refugiarse en un lugar cerrado, con puertas y ventanas aseguradas, es crucial.
Además, sugiere desconectar aparatos electrónicos durante una tormenta. Un rayo puede viajar por cables, estructuras metálicas o incluso paredes de concreto. Alejarse de estos elementos reduce significativamente el peligro.