Fuertes lluvias que azotaron el cantón Muisne, de Esmeraldas, durante la madrugada del 10 de abril, provocaron deslizamientos e inundaciones que afectaron viviendas y cultivos. De acuerdo con los reportes iniciales, la situación en el lugar es crítica, con múltiples emergencias que demandan atención inmediata.
La alcaldesa de Muisne, Yuri Colorado, informó sobre el despliegue de equipos técnicos y operativos del municipio en las zonas afectadas. Los recintos de Balsalito, San Jacinto y San Gregorio, experimentaron el desbordamiento de esteros por las fuertes lluvias, que generó inundaciones en fincas de cacao. Esta situación pone en riesgo la producción agrícola local y la subsistencia de numerosas familias.
Cabe recordar que el cantón Muisne históricamente enfrenta desafíos relacionados con el clima, incluyendo fuertes inviernos y oleajes. Su ubicación, al sur de la provincia de Esmeraldas, la convierte en un punto sensible a las variaciones del clima y a los fenómenos oceánicos.
Las fuertes lluvias azotan otras zonas
Asimismo, en la capital esmeraldeña también se registraron lluvias, pero estas no generaron mayores inconvenientes. Sin embargo, otras zonas de la provincia de Esmeraldas sufrieron las consecuencias del temporal.
En la parroquia La Unión, perteneciente a Quinindé, y en diversas localidades del cantón La Concordia, además de Santo Domingo de los Tsáchilas, la caída de un árbol sobre el tendido eléctrico interrumpió el servicio de energía.
Ante este incidente, técnicos de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL EP), con el apoyo crucial del Cuerpo de Bomberos, se movilizaron rápidamente para retirar el obstáculo y trabajar en el restablecimiento de la conexión eléctrica, buscando minimizar el impacto en la población.
Adicionalmente, transportistas que transitaban por la carretera Alóag – Santo Domingo reportaron una congestión vehicular durante la madrugada, ocasionada por la caída de rocas cerca del río Lelia, evidenciando los efectos colaterales de las intensas lluvias.